La decisión de la peluquera de un pueblo de La Rioja que cambia la vida de cientos de vecinos
Ana Vecino se enteró de que en los pueblos del Camero Viejo no tenian peluquería y que los más mayores no podían lanzarse a la carretera asique decidió ir en su ayuda
Guadalajara - Publicado el
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Ana Vecino es peluquera, pero no una peluquera cualquiera. Fue hace años cuando una clienta suya que acudió a su peluquería de Torrecilla de Cameros le propuso "ir a dar el servicio por su pueblo, a ver si se podía" porque había muchas personas mayores que no podían bajar hasta Torrecilla.
"Se corrió la voz" y en El Rasillo le ofrecieron un espacio en el Ayuntamiento para cortar el pelo a los vecinos. Es una estrategia para prestar ese servicio a las 130 personas que viven en este pequeño municipio del sur de La Rioja.
Se calcula que la zona despoblada ocupa más del 60% del territorio, con una densidad de población de 4 habitantes por kilómetro cuadrado. La despoblación en las zonas rurales es un auténtico desafío, un reto. 60 municipios de La Rioja cuentan con menos de 100 vecinos y en su mayoría son personas mayores y no pueden andar de un lado para otro. Entonces, ¿qué haces cuando los servicios básicos se han ido de tu pueblo?
Peluquería rural en La Rioja
En la comarca del Camero Nuevo, la mayoría de los municipios no superan los 300 habitantes y hasta hace un tiempo, no tenían peluquería. Y así seguirían las cosas si no fuese por Ana Vecino. Decidió echarse a la carretera para cubrir las necesidades de las personas mayores que no pueden ir a otros pueblos: "presto servicio en El Rasillo los miércoles y los jueves en Ortigosa" pero además presta servicios a "otros pueblitos de alrededorK pero a domicilio".
Ana tiene claro que si no lo hiciera ella, no lo haría nadie: "Este servicio mantiene vivo el medio rural, potencia la calidad de vida de los habitantes de los Cameros y mientras yo pueda lo seguiré haciendo". Cortarse el pelo es una cuestión de higiene e incluso en pueblos como El Rasillo, de 130 habitantes, le han cedido un espacio en el Ayuntamiento para que instale allí los bartulos cuando va.
Eso sí, cuando llega el invierno a veces no puede ir a trabajar: "Estás allí trabajando y se pone a nevar y me tengo que marchar porque si no no podré bajar a casa". La carretera es complicada en esas zonas y los clientes saben que si hay hielo "no debo subir, me llaman y me avisan para que no suba".