La Policía Nacional vigila las entrañas de Pamplona todos los Sanfermines

Sobre las calles de Pamplona, ya se van ultimando los preparativos para las fiestas de San Fermín. Y bajo ellas, también lo hace el Grupo de Subsuelo de la Policía Nacional.

Bajo los adoquines del casco antiguo de Pamplona, un grupo especial de la Policía Nacional recorre los más de cuatro kilómetros de galerías para garantizar la seguridad de la ciudad.

Todos los días, durante los Sanfermines, vuelven a inspeccionar el recorrido del encierro poco antes de su inicio, para comprobar que no hay ningún contratiempo. “Todos los días se realiza una revisión rutinaria sobre las siete de la mañana, antes de que empiece el encierro. Se comprueban las medidas de seguridad, sobre todo el tema de las tapas. Estas llevan una cadena, son medidas mecánicas de seguridad para evitar posibles sabotajes o siempre alguna tontería de que alguno intenta hacer alguna chorrada”, indica Andrés Rodríguez, oficial jefe del operativo.

¿Has visto las pegatinas azules en las alcantarillas de Pamplona? Son un indicativo de que esa entrada ha sido revisada y permanece sellada. Desde dentro, se puede ver cómo esas alcantarillas están atadas con unas cadenas al subsuelo, para que ninguno pueda abrirlas desde fuera.

Para realizar esta labor, el equipo policial atraviesa esos más de cuatro kilómetros de galerías soterradas sobre una plataforma metálica y rodeados por cables y tuberías. El contenido de estos conductos, puede ser tóxico o inflamable, pero es el que hace que funcione la ciudad.

Por debajo de la pasarela va el tubo de la recogida neumática instalado en el centro de Pamplona en 2011. Por los costados, el agua potable y las fecales. “Fibra óptica, alumbrado eléctrico, los semáforos, las aguas fecales, aguas potable debajo, las basuras”. También hay cuatro estanterías repletas de cables que recorren las galerías. Además, de los cables habituales, durante los Sanfermines, los distintos medios de comunicación meten toda su fibra para poder emitir.