El Monumento a la Batalla de Vitoria, en alerta: "Va a acabar cayéndose"
COPE Euskadi aborda con Hispania Nostra la entrada en su lista roja de este icono de la ciudad, cuya importancia nos descubre el historiador Eduardo Inclán
Vitoria - Publicado el - Actualizado
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Uno de los emblemas de la capital alavesa es el Monumento a la Batalla de Vitoria, que preside la céntrica plaza de la Virgen Blanca. Una obra de Gabriel Borrás que se eleva 17 metros sobre el suelo. Impresiona. Está realizado en bronce y piedra y se erigió en 1917 para conmemorar el centenario de ese episodio bélico que supuso el 21 de junio de 1813 la retirada de las tropas napoleónicas de José Bonoparte.
El episodio queda reflejado en los dos ejércitos esculpidos alrededor de una torre coronada por una mujer alada que representa la victoria. El historiador Eduardo Inclán explica en COPE Euskadi que "esta batalla pone a Vitoria en el centro de la historia del siglo XIX, ya que fue una gran derrota del ejército napoleónico" que tuvo repercusión en los múltiples países con los que luchaba.
Sables rotos
Se trata de un monumento, con más de un siglo de edad que representa un capítulo muy destacado de la historia, y que es muy apreciado en Vitoria, como contatan en nuestros micrófonos Mari Paz y Loli, dos vecinas veteranas de la ciudad, que han crecido con él y que piden más atención para su conservación.
Hace días que saltaron las alarmas por el mal estado del monumento. "Todo lo que sobresale en el relieve como gorros, sables o bayonetas está roto, doblado o desaparecido", según lamenta en COPE Euskadi Igor Cacho desde Hispania Nostra, asociación que protege el patrimonio, y que acaba de incluir este icono de Vitoria en su lista roja.
"Si no se interviene el monumento va acabar resquebrajándose y cayéndose" advierte a la vez que reclama "no escatimar" recursos y acometer un "plan de restauración" cuanto antes. Si quieres escuchar la entrevista entera pincha AQUÍ.
Limpieza superficial
La última limpieza se realizó en 2014 para retirar retirar la pintura que arrojaron dos menores. En 2013 se acondiocionó para el bicentenario de la Batalla de Vitoria y en 2001 se llevón a cabo una limpieza superficial. Hay que remontarse a 1984 para dar con una intervención algo más profunda.
Sobre la conservación del monumento el Ayuntamiento de Vitoria, a propuesta del PP, debatirá en un pleno municipal el próximo 16 de febrero, entre otras cosas, para acometer este mismo año una restauración integral y aumentar su protección como "bien de interés cultural" para que pase de la lista roja a la verde y no a la negra, que es cuando ya no hay solución.