Ergofobia, miedo a la vuelta al trabajo

Hablamos con Pedro Martínez sobre la vuelta a la rutina y los problemas psicológicos que puede provocar

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

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La vuelta a la rutina y al trabajo puede ser muy traumática para muchos, tanto que existe una fobia a esa vuelta, se le llama ergofobia, el miedo a volver al trabajo. Nuestro psicólogo, Pedro Martínez nos cuenta en qué consiste, es importante diferenciar bien lo que es la ergofobia con la habitual y normal “pereza” de volver de vacaciones a la vida laboral y rutinaria menos agradable. En este caso hablamos de personas que sienten auténtico pánico a volver a su contexto laboral, los ergófobos temen tanto este contexto laboral que generan “una indefensión y una impotencia que provocan señales físicas de ansiedad desproporcionadas que se acompañan en ocasiones por la depresión”.

¿Qué hay detrás de esto? Pues puede esconder casos de acoso laboral o de climas laborales tóxicos, es necesario “estudiar todas las variables porque, aunque la clave está en la percepción que tiene la propia persona sobre todo eso, indudablemente la acción de estas variables pueden contribuir en hacer muy complicado el abordaje del problema”.

Si se sufre de esto es importante acudir a un profesional que pueda identificar de dónde proviene este miedo y que proporcione las herramientas necesarias para ayudar a desensibilizar la situación. “Es necesario ser muy preciso y muy técnico a la hora de afrontarlo, porque las fobias no son ninguna tontería, como uno se obligue a hacerlo, pero no tenga herramientas para afrontarlo, al final lo que hace es reacondicionarlo”. Un profesional aporta las herramientas que hagan posible el éxito a la hora de afrontar el miedo, porque si cuando se afronta se fracasa, el miedo se retroalimenta y es más complicado salir.

Otro trastorno relacionado con el entorno laboral es la sisifemia, que son aquellos que se ponen objetivos inalcanzables, demasiado excesivas para las posibilidades. Muchos de los que sufren este trastorno se autoimponen una carga desproporcionada de trabajo que les hace vivir agobiados constantemente, aumentando los niveles de estrés hasta el límite. No aprenden a distinguir lo urgente de lo importante, no sabe decir que no y se le acumulan cada vez más tareas hasta el punto de que puede llegar a ser una carga inalcanzable, es una situación insostenible “que va a revertir contra todos”.

La clave para llevar bien la vuelta a la rutina es la perspectiva con la que se ve esta vuelta, es muy importante no pensar en esa vuelta de forma pesimista y centrarse en disfrutar de los últimos días de vacaciones. Una vez llegue el momento de volver, lo ideal es planificar y organizar esa vuelta, respetando los descansos que es lo que permitirá recuperar el tono perdido durante las vacaciones. De ninguna manera pensar que no se puede superar este regreso.