Schlichting: "Qué miedo de que uno como Pablo Iglesias pueda llegar a presidente" de la República

Cristina L. Schlichting

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”¡Muy buenos días España! Mañana lunes, a las 11 de la mañana, se produce el solsticio de invierno en el hemisferio Norte. ¿Y qué es el solsticio, por qué me da por la astronomía? Pues es uno de los dos momentos en que el sol pasa por el punto más alejado de la curva elíptica que hace normalmente alrededor de la tierra. O sea, que está más lejos y produce el día más corto del año. Apenas 9 horas y 18 minutos de luz. Y empieza oficialmente el invierno.

A partir de entonces, el día 22 vamos, se empiezan a alargar los días, que es un alivio ¿no os parece?

Hemos llegado al corazón de la oscuridad y ya podemos encender la cuarta vela de la corona de Adviento, porque se acaba la espera, el jueves es Nochebuena. El Adviento, como decía esa presa de la cárcel del Acebuche de Almería que os contaba la semana pasada, es “el presentimiento de que algo va a ocurrir”.

Puede ser bonito encarar así la fiesta de Navidad, que este año se presenta un poco más silenciosa, un poco más sobria, un poco más recóndita.

Quizá, pensémoslo, un poco más parecida a la original, cuando Cristo nació en Palestina, en un ambiente rural, en una familia pequeña y no especialmente boyante. A lo mejor es la oportunidad de que los regalos, los gritos, los brindis, no sepulten la reflexión de que, quizá, estamos bien hechos y la nostalgia que sentimos en el corazón tiene una razón de ser.

Como la sed, que existe porque existe el agua.

Tal vez la esperanza nos lleva con pie firme camino de Belén, donde ese niño dijo cosas extraordinarias. Que nos quería, así como somos, para siempre.

Muy feliz Navidad amigos, os desea este equipo que intenta acompañaros y ayudaros todos los Fines de Semana.

El Gobierno sigue legislando en medio de lo peor de la pandemia

No somos los únicos en extremar las medidas contra el coronavirus. En Gran Bretaña el primer ministro Boris Johnson ha tenido que anunciar que el grupo asesor de amenazas de virus respiratorios emergentes ha alertado sobre la nueva cepa de covid, una mutación que aunque no parece que produzca más mortalidad sí es más contagiosa y lleva más gente al hospital, un 70 por cien, como si el bicho no se pegase suficientemente rápido. En consecuencia se han elevado anoche las restricciones y se ha decretado confinamiento en Londres y el Sudeste del país.

Se cierran todas las tiendas no esenciales, se prohíbe viajar excepto por trabajo y también mezclarse con otros hogares. La nueva variante del virus apareció se septiembre en Londres y Kent, aunque se ha anunciado hace una semana y ahora es la dominante en la capital, donde la padece el 62 por 100 de los diagnosticados.

En España, el Gobierno sigue legislando a toda máquina en lo peor de la epidemia. Ley de Eutanasia, Ley de Memoria Democrática, Ley de Transexualidad, Ley Celaá. Hoy se reproduce la marea naranja contra esta última, la ley de educación contra la concertada, la educación especial y el castellano como idioma oficial y lengua vehicular. Ahora el Gobierno considera las cuestiones económicas con podemos que, en plena crisis, quiere eliminar la reforma laboral que tanto redujo el paro, subir el salario mínimo e incrementar las pensiones.

Mientras las pimes cierran a mansalva. Hay que ver cómo les sobra el dinero.

¡Ascazo!

Ayer hizo declaraciones Pablo Iglesias, que subrayó que perseguirán sus metas con cabezonería, porque para eso les han votado. El de Podemos se felicitó del rendimiento que está sacando a su escasa representación parlamentaria y advirtió que esta semana el discurso del Rey servirá para potenciar el republicanismo que ellos proponen.

No conozco a nadie tan creído como para colonizar el discurso del Rey. A ver si va a ser que, cada vez que este sujeto se chulea de esta manera se potencia la admiración por Don Felipe. Porque hay que ver qué miedo de que uno así pudiera llegar a presidente.

Me quedo con una respuesta que ha escrito en twitter una parlamentaria del PP, Ana Vázquez Blanco, que dice así: “Con la que está cayendo. Más de 300 autónomos cerrando cada día, las colas del paro y la pobreza creciendo y el patético este diciendo estupideces. Pablo, en Nochebuena la preocupación será poder comer y trabajar. Ascazo”.

Pues eso, ascazo. Es tremendo pensar que es inevitable que los gastos públicos, la mala administración y el derroche permiten entrever lo que va a pasar de aquí al 2023. Entraremos en quiebra y el paro alcanzará a los cinco millones de personas. Entonces llegarán los hombres de negro de Bruselas y, como pasó en Grecia, se acabará la aventura comunista. Pero lo malo es que antes habrá mucha pobreza y dolor. En este país, eso sí, donde la seguridad social te da para quitarte de en medio con pentobarbital sódico, como en Holanda, pero no te paga los empastes de las muelas de tus hijos.

Porque hay que ver el texto de la ley de eutanasia, que hay que tener estómago. Distingue dos métodos. Leo. Uno, que el profesional sanitario pone fin a la vida del paciente de forma deliberada, porque lo ha pedido, y otra, que el propio paciente se quita la vida con la colaboración de un profesional sanitario que “facilita los medios, la substancia y dosis necesarias”. Un veneno. Un gusto vamos, que nos están dando las Navidades".