El aviso de Gay de Liébana a los españoles sobre los impuestos

Habrá que ver si las posibilidades económicas de los españoles son capaces de aguantar los presupuestos imprimidos en papel

Gay de Liébana

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El profesor José María Gay de Liébana analiza en'Herrera en COPE’ las claves económicas del día.

Con los presupuestos en tránsito hacia el Senado y a la espera de su regreso a la Carrera de San Jerónimo, para ser sentenciados, ya tenemos las cifras del venidero garrotazo fiscal. Habrá que confiar en que la economía en 2021 esté a la altura de las circunstancias presupuestarias porque, de lo contrario, algo no encajará. Hablamos de unos presupuestos para el próximo año, y quién sabe si llegarán a marcar el rumbo de los siguientes a base de prórrogas, progresistas, que incurren en una propensión expansiva que, a la vista de las previsiones generalizadas, no encajan con el devenir económico. Concretemos. La presión fiscal será en 2021 de 450.700 millones de euros (36,8% del PIB), por encima de los 416.720 millones de 2020. Por consiguiente, serán 33.980 millones de euros más que se prevé recaudar en concepto de impuestos y cotizaciones sociales. ¿Cómo se concreta tal aumento? El capítulo de impuestos sobre la producción e importaciones presupuesta 146.967 millones de euros, 19.851 millones más que en 2020. Como uno de los principales impuestos indirectos es el IVA y otro la miríada de Impuestos Especiales, amén de nuevas criaturas tributarias que vean la luz, tal incremento de casi 20.000 millones será achacable a un animoso rebote de la actividad económica – cosa que está en tela de juicio – y a mayores esfuerzos fiscales por parte de los ciudadanos al soportar más cargas tributarias.

La rúbrica de impuestos sobre la renta, riqueza, patrimonio, capital, lo que podríamos agrupar como impuestos directos, se presupuesta en 143.293 millones de euros, 12.861 millones más de recaudación que en 2020. Más estacazo fiscal por este frente. Habrá que ver si las posibilidades económicas de los españoles son capaces de aguantar los presupuestos imprimidos en papel