¿Cómo se solucionan los conflictos entre trabajadores y su empresa?: "Es como una relación personal"

El economista Fernando Trías de Bes analiza en 'La Tarde de COPE' la resolución de conflictos laborales, subrayando que estos son "inherentes a la actividad profesional"

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

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El trabajo es uno de los lugares donde más horas pasamos. Los compañeros se convierten en nuestra segunda familia incluso, en ocasiones, estamos más tiempo con ellos que con nuestra verdadera familia. No obstante, como en toda familia se producen conflictos, y más, teniendo en cuenta que cada persona tiene su propia personalidad. Por lo que es muy fácil que se produzcan conflictos no solo entre compañeros sino también con los jefes o entre departamentos.

Los conflictos laborales se definen como el enfrentamiento o disputa entre dos o más personas que se produce en un entorno laboral. Aquí cabe reseñar que hay ambientes físicos y labores que generan una mayor conflictividad laboral que otros. Con lo que son un punto clave en cualquier empresa.

Estos pueden surgir de distintas causas y siempre es importante resolverlas en su momento porque son claves tanto en el ambiente laboral como en la motivación que tienen los trabajadores. No solo eso, sino que este problema a la larga puede afectar al rendimiento y a la productividad de la empresa.

Depende de las causas

Según las causas que lo generan, los conflictos pueden ser varios. Uno de ellos, de relación, que tiene lugar al chocar personalidades muy diferentes. También de información, a causa de malentendidos por no haber una buena comunicación y la información puede tergiversarse. A estos se suma el de intereses, ya que algunos pueden dar como prioridad a sus propias máximas antes que a las del grupo. Están también ..., cuando intenta imponer sus valores a los de otro. Y, finalmente, los estructurales cuando existen desigualdades educacionales o culturales.

Pero, ¿realmente todos los conflictos que se producen en una empresa son malos? Lo hemos analizado en 'La Tarde de COPE' con nuestro economista de bosillo, Fernando Trías de Bes. Apunta a que esto no siempre es malo y que "tiene un lado positivo". El problema es que esta palabra se ha convertido en una palabra peyorativa.

Por sorprendente que parezca, como apunta el economista este tipo de problemas "es inherente a la actividad profesional". No solo eso, sino que ha señalado que "una organización sin conflictos es una organización apalancada o monopolística o que no avanza. Es decir, el conflicto es algo cosustancial a las organizaciones empresariales". Además, ha fijado que las empresas son como las relaciones personales y como sucede en estas suele haber conflictos.

Trías de Bes considera que "el conflicto bien gestionado hace que las organizaciones avancen sean más fuertes como las relaciones". A la hora de resolverlos, se emplea una disciplina trasversal que se emplea en distintos escenarios aparte del empresarial como es el económico. Y que el único aspecto que tienen los conflictos es que "se vuelva permanente, lo que implica que es una organización donde los cimientos no están bien puestos". Por lo que los conflictos puntuales no solo no son negativos sino que ayudan a la empresa a evolucionar.

Dentro de los conflictos empresariales hay dos: el destructivo y el constructivo. El constructivo es aquel en el cual las personas que tienen un conflicto contra su jefe, su compañero... tienen la voluntad de resolverlo. La idea es que lleguen a una solución sana, provocando que la relación avance. Por otro lado, el destructivo implica que a una de las partes no le interesa realmente solucionarlo. Lo que se produce es una lucha de poder o tienen miedo al cambio... Es un comportamiento que destroza.

Alrededor de todo esto, se ha creado toda una estructura de especialistas encargados de solucionar este tipo de problemas. No solo es una materia que ya se imparte en multitud de grados de distintas universidades, sino que hay hasta catedráticos.

Fernando Trías de Bes considera que lo más importante es "reconocer que hay un conflicto". Esto lo señala como primordial y apunta a que "el siguiente paso es escuchar a través de las preguntas. Así, desde la igualdad, el respeto se intenta empatizar con todos los puntos de vista y una vez escuchadas ambas partes tienen que tener voluntad de resolución". En este momento, es clave que las soluciones se tomen de forma conjunta. No solo eso, sino que "siempre es bueno que cedan ambas partes, porque sino una de las partes queda herida. A pesar de esto, todo sirve de aprendizaje y ambas partes valoran ese acercamiento. Para esto, también hace "falta ser creativos". Todo para lograr un fin conjunto, que la empresa progrese.