¿A qué se dedica realmente un 'mediador'? La Tarde explica cómo desbloquean conflictos irreconciliables
De Israel a Junts y el PSOE: Dos mediadores profesionales desvelan en COPE cuáles son sus técnicas para acercar posturas
Madrid - Publicado el - Actualizado
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Últimamente hablamos mucho de la figura del negociador, mediador, árbitro, verificador… Encima de la mesa, el conflicto en Gaza o el tema de la amnistía, que nos toca más de cerca, y en el que no ha hecho falta un mediador, sino dos. O mejor dicho “verificadores”. Uno de ellos será el diplomático de El Salvador Francisco Galindo, experto en la guerrilla colombiana de las FARC, y será el que vigilará que los acuerdos entre PSOE y Junts se cumplan. Y, por parte de Esquerra, también tendrán su verificador para hablar con el PSOE.
Pero, ¿sabemos realmente qué cualidades debe reunir un intermediario para tener éxito? Nacho Tornel, mediador familiar y autor del libro “Emparejados”, explica a Pilar Cisneros en COPE qué es lo fundamental a la hora de afrontar un conflicto que tiene posturas irreconciliables.
“Se trata de confianza, al final son dos personas que se acercan a ti y buscan a alguien imparcial sobre un proceso en el que las dos partes están metidas hasta las trancas de subjetividad, pero deben confiar en ti. Esa parte es fundamental”, asegura Tornel, que reconoce que la gran mayoría de sus clientes son familias, pero en especial parejas.
¿Cómo se desbloquea un conflicto irreconciliable?
Así, Tornel ha querido poner encima de la mesa el que reconoce que es el caso más habitual con el que trabaja: parejas que están fijados en posiciones completamente contrarias. Concretamente, expone un caso: un matrimonio que no quiere ir por Navidad a la casa de uno de los dos porque se siente ofendido con algún comentario pasado de algún familiar. ¿Cómo se resuelve este caso?
“Lo que suelo ver es bloqueo absoluto, la playa o la montaña, están enrocados en una posición concreta”, asegura Tornel. Así, apunta que lo primero que tienes que hacer es “descender de esas posiciones irreconciliables a los intereses que hay detrás, ahí sí que hay puntos de encuentro”. “Bajar hasta por qué estás tan empeñado en algo y cambiar la dinámica. Lo más importante es que hay que probar algo distinto”. Aplicado a este caso, se trataría de buscar qué condición pondrían ambos sujetos: ¿el perdón del familiar? “Algo que les baje de esas posiciones”.
El papel de un mediador parcial
También ha pasado por los micrófonos de La Tarde Carlos Jacob, asesor jurídico de empresas y en la patronal madrileña de empresas del metal y que tiene amplia experiencia en mediación laboral. Por su parte, destaca que su trabajo es un poco diferente. “En nuestro terreno es obligatoria la mediación”.
“Es verdad que las partes pueden elegir a un mediador, partes de la confianza de una parte. Una vez que ya están, tienes que ser absolutamente imparcial, y ahí llega el ganarte la confianza”, mantiene. Por último, recuerda que, en un conflicto de esta clase, “todo el mundo cree que tiene la razón”, y “probablemente la tienen desde su punto de vista”.