¿Son las desaladoras una solución para la sequía? Un experto destapa los pros y los contras

Baltasar Peñate, ingeniero y responsable del departamento de agua en el Instituto Tecnológico de Canarias, explica en 'La Tarde' cómo funcionan y qué podemos esperar de ellas

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

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Por cada metro cúbico de agua que se obtiene de agua desalada, otro metro cúbico de salmuera se va al mar. Lo ha dicho el presidente de Murcia, Fernando López Miras, en una entrevista con Carlos Herrera esta mañana.

Hoy nos hacemos esta pregunta porque hemos confirmado que el Gobierno y la Generalitat de Cataluña han acordado llevar 20.000 metros cúbicos de agua de Valencia a Barcelona a partir de junio «si es necesario». En total tenemos 765 desaladoras por todo el país. Somos los quintos en el ranking mundial, detrás de Emiratos Árabes, Libia, Estados Unidos y Arabia Saudí.

De las seis desaladoras que hay en la comunidad valenciana, tres están en Alicante. Allí vive Jorge Olcina director del laboratorio del clima de la universidad de Alicante y geógrafo. La de Torrevieja es una de las más grandes de Europa, Jorge he explicado que es un “agua totalmente pura... prácticamente sale sin sales”.

Los pros y los contras de las desaladoras

Problemas de las desaladoras: tienen un alto coste, consumen mucha electricidad; y los residuos de salmuera que generan ya que devuelven al mar agua con un elevado contenido en sales que provoca daños importantes en las praderas marinas y a las especies que viven en ellas.

Las desaladoras en España están construidas por toda la costa del Mediterráneo, sobre todo en la comunidad valenciana y en Murcia, pero también en Cataluña, en Andalucía y en Baleares. Pero la primera de España, la primera que se construyó, fue en Canarias. Concretamente en Lanzarote, hace 60 años. Baltasar Peñate es ingeniero y responsable del departamento de agua en el Instituto Tecnológico de Canarias.

Allí hay más de 280 plantas desaladoras, entonces, ¿la mayor parte del agua que se consume en las islas proviene del mar? “Hoy en día sí... pero no todas las islas desalan” ha comentado Baltasar. En Lanzarote y en Fuerteventura el 90% del agua que sale del grifo viene de desaladora. Baltasar comentaba que este no es un problema ni una solución que solo afecte a los canarios: “en Canarias no solo estamos hablando de dos millones de habitantes, estamos hablando de 13-14 millones de turistas al año, y casi todos estos turistas hoy en día se alimentan con agua de salado”.

El funcionamiento de las desaladoras es muy sencillo, se instalan en las costas para poder extraer el agua del mar, la elevan y la someten a una presión muy grande para que pueda pasar por unas membranas de ósmosis inversa, en ellas se queda la sal y se obtiene el agua potable. Con la sal que se genera en este proceso se considera salmuera, y lo más habitual es que se devuelva al mar, pero nunca cerca de la costa.

¿Por que no se han construido desaladoras en la costa catalana por lo que podría pasar ante una situación de sequía prolongada? Solo dos están en Cataluña: la del Prat y Tordera. Jorge comenta que deberían haberse hecho más desaladoras en la costa, para poder garantizar el abastecimiento a la sociedad. Teresa Ribera ha anunciado 500 millones para construir dos desaladoras más en Cataluña.

El Consejo de Ministros de España ha aprobado un plan de actuaciones urgentes para hacer frente a la situación de sequía que atraviesa el país y en él establece la construcción de tres nuevas plantas desaladoras en el sur de la península, con una inversión de 640 millones de euros.

En España se producen más de 5 millones de metros cúbicos de agua desalada al día. Con más de 700 plantas ya construidas se podría suministrar agua para una población de 34 millones de habitantes. Proporcionan el 9% de nuestra agua potable

La construcción de una de estas plantas conlleva un importante coste, comprendido entre 50 y 200 millones de euros según su capacidad.