¿Cómo es vivir con multitud de alergias? "No me supone ninguna limitación"

Imaginarse un panorama en el que las alergias y las intolerancias limiten al máximo nuestro día a día, puede suponer una sensación de lo más desagradable y, sobre todo, ser conscientes de que lo que hagamos puede suponernos problemas de salud, por lo que ser cautos resulta algo fundamental para preservar un estado de salud propicio.

En estos meses primaverales, (especialmente este mayo que estamos finalizando), es habitual que todas las personas que sufren alergias por gramíneas y demás pólenes de diferentes plantas; estén acostumbrados a los estornudos, toses, picor de ojos y constante secreción mucosa... Una pesadilla constante que, como si fuera algo usual, los alérgicos consiguen aguantar.

Si nos dirigimos a la franqueza de los números, según datos de la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica, en España entre el 20 y el 25% de la población sufre alguna enfermedad alérgica. El problema de estas cifras, que ya de por sí son llamativas, es que la cantidad ha llegado a duplicarse en los últimos treinta años.

Alicia Gallardo es alergóloga en el Hospital clínico Universitario de Salamanca, y en la mañana de hoy ha pasado por los micrófonos de Mediodía COPE con Pilar García Muñiz. La experta ha señalado la existencia de diferentes teorías como aspectos clave para determinar este aumento de sensibilidad a este tipo peculiar de patología. Una de esas claves, y quizá la más fundamental, es la higiene.

Una vez que se desarrolla la enfermedad, se empieza por la alergia a alimentos, la dermatitis atópica, la conjuntivitis y finalmente el asma. Normalmente, esta sería la cronología de la enfermedad, unos pasos a seguir que determinarían los primeros síntomas de las alergias. A estas causas, debemos destacar también algo determinante que, especialmente, se da en las grandes ciudades. Hablamos de la contaminación.

Sin embargo, la doctora nos cuenta que el uso de mascarilla no ha incrementado los casos de alergia, pero que, por otro lado, sí ha habido pacientes alérgicos que han tenido otros síntomas. En cuanto a las alergias alimenticias, las cifras oscilan el 5% de los adultos y entre el 7 y el 8% de los niños. Aunque hay un caso que es especialmente llamativo; el de Luis López, un joven que tiene 22 años y cuenta con varias alergias.

A sus 22 años, Luis es alérgico a los frutos secos, las legumbres, el huevo, la soja, algunas frutas, especialmente el melocotón, algún marisco, algunos medicamentos y el polen. Una colección de intolerancias que, a buen seguro, dificultan su día a día, pero aun así no deja ningún plan de lado. Cuenta que si en algún momento surge un plan, se lleva su comida y segura que en ningún momento le supone un problema o una limitación. Igual si estáis en algún bar, te llevas tu comida o te vas cenado de casa y sin problema.