Lo que los humanos hacían hace millones de años en España que se repite ahora: no inventamos nada

No lo hacían por turismo o para jubilarse como actualmente, pero se ha descubierto que la península ibérica fue protagonista en la fase más fría de la Edad de Hielo

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

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Nos ponemos históricos porque se ha descubierto que la península ibérica sirvió de refugio europeo durante el período más frío de la Edad de Hielo. Ya debía de haber entonces un Esteso se emocionaba cuando llegaban las suecas, las noruegas, las alemanas y todos los que ocupaban aquellos lugares durante la glaciación. Te estoy hablando de hace entre 25.000 y 19.000 millones de años en los que hizo frío, pero no el frío que estamos pasando estos días. El de verdad.

Algunos más que otros, pero los humanos hemos demostrado que no somos tontos. De hecho, nos hemos hecho con el cotarro y somos los que dominamos el planeta. Entonces que hicieron, pues, buscar de toda La Tierra el sitio donde más calorcito hacía para mudarse. Y encontraron la Península Ibérica. Este estudio lo único que confirma es que nosotros y nuestras playas llevamos años, millones de años, soportando el peso de la humanidad. Porque ahora estamos igual que en la Edad de Hielo, ya que alemán y británico que se jubila, ¿dónde termina viviendo? Correcto. En nuestro país.

Y por lo que vemos es que no han inventado nada, hace siglos que saben que el clima bueno es el nuestro. Aunque, reconozcámoslo, los españoles nos tenemos algo callado desde hace siglos y es que no todo el país goza todo el año de las temperaturas de la Costa del Sol. Ya lo dice Leo Harlem: "Si falla Noruega en la media del frío, hacen un encargo a Zaragoza". Allí lo bueno es que no vas a ver a ningún jubilado del norte de Europa. Pero el Este y el Sur del país son el destino preferido desde hace bastante tiempo para muchos ciudadanos del mundo.

El estudio

El trabajo, en el que ha participado el Instituto de Biología Evolutiva del CSIC y la Universidad Pompeu Fabra (UPF) y cuyos resultados han sido publicados en Nature, recabaron información genómica de 16 cuerpos humanos en el sur de España, incluido un varón de 23.000 años de la Cueva del Malalmuerzo, Granada. Este individuo muestra una continuidad entre las poblaciones de culturas arqueológicas anteriores y posteriores. En concreto, los investigadores han identificado una ascendencia auriñaciense, "la primera cultura de gran dispersión en Eurasia asociada unívocamente a humanos modernos", explica a SINC Vanessa Villalba, miembro del IBE.

Pero, más allá de un refugio climático, fue un callejón sin salida. Hasta ahora, se creía que los principales lugares de protección fueron "las tres grandes penínsulas: Iberia, Italia y los Balcanes". Sin embargo, el equipo involucrado en el estudio de Posth ha descubierto que "mientras que las poblaciones del suroeste de Europa sobrevivieron, las de la península itálica perecieron". Además, los autores no encuentran conexiones genéticas con el norte de África, demostrando que "el Estrecho de Gibraltar seguía siendo una barrera geográfica formidable".

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