Aquilino Bocos se refiere a Fernando Prado "como hombre que arde en caridad" y le pide "gobernar y santificar"

Ante una catedral abarrotada y con la patrona de Guipúzcoa en el altar, la diócesis de San Sebastián ha recibido a su nuevo obispo, el claretiano Fernando Prado

Aquilino Bocos se refiere a Fernando Prado "como hombre que arde en caridad" y le pide "gobernar y santificar"

Redacción Religión

Publicado el - Actualizado

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La catedral del Buen Pastor de San Sebastián se ha quedado pequeña para recibir a su nuevo obispo, el claretiano Fernando Prado, quien ha recibido la ordenación episcopal para ser titular de la diócesis donostierra.

Una celebración emotiva que no ha querido perderse tampoco el Padre Ángel (fundador de Mensajeros de la Paz) junto a más de cien fieles de San Antón (Madrid).

Aquilino Bocos: "Fernando ha tratado de vivir como hombre que arde en caridad"

Ante la presencia de Nuestra Señora de Aránzazu (patrona de Guipúzcoa) que ha sido traída desde el santuario este mismo sábado para presidir el altar, el cardenal Aquilino Bocos ha sido el celebrante principal de la Santa Misa. El también claretiano ha remarcado que se ha vivido un día de gozo y “de esperanza para el Pueblo de Dios que camina en Guipúzcoa”.

“Es día de acción de gracias, porque el Papa Francisco os ha enviado a Fernando para que sea vuestro Pastor según el corazón de Cristo y le agrega al Colegio de los Obispos, sucesores de los Apóstoles. Esta celebración, pues, es profundamente eclesial. Revive el misterio, reafirma la comunión y relanza la misión de esta Iglesia de San Sebastián”, ha expresado el cardenal Bocos.

Asimismo, ha recalcado que es un día de esperanza, ya que considera que Fernando Prado “quiere ser para todos los fieles y para todos los que le contemplen modelo en el amor, la fe y la esperanza. Quiere ser padre, hermano y amigo de todos los miembros de esta Iglesia que se le ha encomendado”, ha continuado afirmando.

Aquilino Bocos ha elogiado la figura de Fernando Prado, quien asegura haber seguido los pasos de San Antonio María Claret: “Fernando ha tratado de vivir como hombre que arde en caridad y que no piensa sino cómo seguirá e imitará a Jesucristo en orar, en trabajar, en sufrir y en procurar siempre y únicamente la mayor gloria de Dios y la salvación de los hombres”, ha indicado.

El ministerio pastoral "comporta enseñar, gobernar y santificar”

Aquilino Bocos ha recordado el claretiano, el ministerio pastoral “comporta enseñar, gobernar y santificar”, y agrega que un obispo “encarna el principio de unidad y es artífice de comunión con el Papa, los obispos, sucesores de los apóstoles, y todos los miembros de su diócesis. Dentro de ella, está urgido a mantener activa la escucha, la apertura, el discernimiento, la acogida y la colaboración con los sacerdotes, los consagrados y los laicos”.

Para Bocos, Fernando Prado llega a la diócesis vasca en un tiempo privilegiado para fomentar la sinodalidad en la Iglesia: “El objetivo es hacer mejor, más creíble y efectivo el anuncio de Jesús como el Señor. También es tiempo de hacer operativa la sinodalidad. Caminar y pensar juntos, orar y deliberar juntos, mantener abierto el horizonte de esperanza para todos, apoyar a los que se hallan en dificultad, sanar heridas y acompañar soledades”, ha subrayado.

En este sentido, el cardenal claretiano ha pedido a la asamblea y a los fieles avivar la fe e intensificar la oración para que Jesús “le otorgue mirada limpia, mente abierta, audacia profética, fortaleza de espíritu y mansedumbre evangélica. Pongamos la vida y misión pastoral de Fernando bajo la intercesión de Santa María de Aránzazu, Patrona de Guipúzcoa, madre de la esperanza y reina de la paz; de San Ignacio de Loyola, patrono de la diócesis, precisamente en este IV centenario de su canonización; y de San Antonio María Claret en quien inspiró su vida misionera”.

“Hoy la Iglesia de San Sebastián se asocia para trabajar con el nuevo pastor"

Por su parte el Nuncio Apostólico en España, Bernardito Auza, ha invitado a Fernando Prado a“dar razones de vida y esperanza propiciando a la sociedad un encuentro con Cristo, que hace de su Palabra Evangelio”.

El administrador apostólico de la diócesis en estos meses de sede vacante, Francisco Pérez, ha hecho hincapié en la necesidad de “la unidad y comunión en la Iglesia” como mayor garantía de que “Cristo está entre nosotros”.

“Hoy la Iglesia de San Sebastián se asocia para trabajar con el nuevo pastor. Y ese será nuestro distintivo. La luz que es cristo será compañía del nuevo pastor así como todos vosotros que habéis venido para acompañar con cariño al nuevo obispo”, ha expresado