La Conferencia Episcopal invita a unirse a la consagración de Ucrania y Rusia al Inmaculado Corazón de María
El cardenal Juan José Omella pide "intensificar nuestra oración por la paz", concretamente el 25 de marzo cuando la Iglesia celebra la Jornada por la Vida
Publicado el - Actualizado
2 min lectura
El presidente de la Conferencia Episcopal Española, cardenal Juan José Omella, ha enviado una carta a todos los obispos de la Iglesia en España en la que invita a unirse al acto de Consagración de Rusia y Ucrania al Corazón Inmaculado de María. Esta consagración tendrá lugar el próximo 25 de marzo, a las 17.00 horas, en la basílica de San Pedro y será presidido por el Papa Francisco. El mismo acto, y a la misma hora, será realizado en Fátima por el cardenal Konrad Krajewski, limosnero pontificio, como enviado del Santo Padre. Además, a esa hora se inicia en Roma la jornada «24 horas para el Señor».
En España, el 25 de marzo, solemnidad de la Anunciación, se celebra la Jornada por la Vida, con el lema «Acoger y cuidar la vida, don de Dios». En este sentido, el cardenal Omella ha señalado: «Sensibles al cuidado de la vida y a la necesidad de intensificar nuestra oración por la paz, invito, en nombre de la Conferencia Episcopal Española, a las diócesis, congregaciones religiosas, asociaciones y fieles laicos a unirse a la intención del Santo Padre en este acto».
Petición de los obispos de rito latino en Ucrania
El pasado 2 de marzo los obispos católicos de rito latino en Ucrania pidieron al Papa Francisco que consagre públicamente este país y a Rusia al Inmaculado Corazón de María, como lo pidió la Virgen de Fátima en sus apariciones en 1917.
“¡Padre Santo! En estas horas de dolor inconmensurable y terrible prueba para nuestro pueblo, nosotros, los obispos de la Conferencia Episcopal de Ucrania, somos portavoces de la incesante y sentida oración, sostenida por nuestros sacerdotes y consagrados, que nos llega de todo el pueblo cristiano, para que Su Santidad dedique nuestra Patria y Rusia”, escribieron en una carta pública al Papa.
En esta línea, el Episcopado de Ucrania solicitó “humildemente a Su Santidad que realice públicamente el acto de consagración al Sagrado Inmaculado Corazón de María de Ucrania y Rusia, como lo solicitó la Santísima Virgen en Fátima”, y rezaron a “la Madre de Dios, Reina de la Paz que acoja nuestra oración: ¡Regina pacis, ora pro nobis!”.
El Papa Juan Pablo II consagró la Iglesia entera y el mundo a María tres veces durante su pontificado, y enseñó que al consagrarse a María aceptamos su ayuda para ofrecernos completamente a Cristo.