La persecución a la Iglesia de Nicaragua se recrudece: quince sacerdotes detenidos en diez días
Desde el 20 de diciembre, la policía ha arrestado a un obispo, doce sacerdotes y dos seminaristas, según han denunciado organizaciones defensoras de los derechos humanos
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El 2023 no puede terminar peor para la Iglesia de Nicaragua. En las últimas horas, otros cinco sacerdotes nicaragüenses de la archidiócesis de Managua fueron detenidos en las últimas horas por la policía, con lo que suman quince los religiosos encarcelados en el país centroamericano, incluido dos obispos, tal y como ha denunciado este sábado el obispo auxiliar de Managua, Silvio Báez, y la abogada e investigadora nicaragüense exiliada Martha Patricia Molina.
Los sacerdotes nicaragüenses detenidos entre la noche del viernes y lo que va de este sábado son Silvio Fonseca, Mykel Monterrey, Raúl Zamora, Gerardo Rodríguez y Miguel Mántica, todos de la archidiócesis de Managua, según un reporte de Molina, autora del estudio titulado 'Nicaragua: ¿Una Iglesia perseguida?'.
"La dictadura sandinista ha desatado esta semana una feroz cacería contra los sacerdotes llevando a la cárcel a varios de ellos, que vienen a añadirse a dos obispos que ya estaban presos", señaló, por su lado, el obispo auxiliar de Managua, a quien el Papa Francisco ordenó dejar Nicaragua en 2019 por motivos de seguridad, en medio de tensiones entre el Gobierno del presidente Daniel Ortega y la Iglesia católica.
Báez, quien reside en Miami y a quien las autoridades declararon "traidor a la patria" y despojaron de su nacionalidad, dijo a través de su red social X que "sigue la furia de la criminal dictadura de Ortega desatada contra la Iglesia".
El jerarca exiliado rogó "a los obispos y a las conferencias episcopales del mundo que no nos abandonen en este momento, que oren por la Iglesia de Nicaragua y se solidaricen y alcen su voz denunciando esta persecución de la dictadura contra nuestra Iglesia".
Al menos quince religiosos han sido detenidos en diez días
Desde el 20 de diciembre pasado hasta ahora, la policía ha arrestado a un obispo, doce sacerdotes y dos seminaristas, según ha denunciado defensores de derechos humanos.
Ni el Gobierno ni la Policía ha confirmado o negado la presunta detención de esos quince religiosos, que se unen al obispo Rolando Álvarez, quien el 10 de febrero pasado fue condenado a 26 años y 4 meses de prisión, despojado de su nacionalidad, y suspendidos sus derechos ciudadanos de por vida por delitos considerados traición a la patria.
En su mensaje, Báez dijo que "la decisión arbitraria e ilegal de la dictadura sandinista en Nicaragua de mantener a dos obispos encarcelados y de secuestrar a varios sacerdotes en pocos días, evidencia una vez más su desprecio flagrante hacia los derechos humanos, su falta absoluta de respeto hacia la libertad religiosa y su inquebrantable y permanente odio hacia la Iglesia".
"Este odio de la dictadura sandinista hacia la Iglesia es un reflejo de su miedo ante la fuerza liberadora del evangelio, la luz de la verdad de Jesús y el poder de la oración", señaló.
El jerarca consideró que "los tiranos son conscientes de que el pueblo nicaragüense ama a su Iglesia y a sus pastores", y por eso "les aterra la existencia de un pueblo consciente y movilizado por la fe cristiana, porque es un pueblo crítico, libre y sujeto de su propia historia".