La Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional ha reiterado al juez Santiago Pedraz que tiene pendientes de practicar una serie de diligencias en la investigación abierta a un hijo del presidente de Guinea Ecuatorial, Teodoro Obiang, por lo que no puede concluir el sumario, como ha hecho.

Se trata de la causa en la que se investiga al hijo de Obiang y a otros dos miembros de su gobierno por el presunto secuestro y torturas de cuatro opositores en noviembre de 2019.

En un nuevo auto, la sección tercera de lo Penal ha revocado la conclusión del sumario que decretó el juez.

La Audiencia ya estimó recientemente el recurso de familiares de las víctimas, al que se adhirieron la Fiscalía y el Movimiento para la Liberación de Guinea Ecuatorial-Tercera República (MLGE3R), contra el auto del magistrado que rechazaba practicar esas diligencias al haber cedido la jurisdicción a Guinea.

Porque esa decisión de enviar la causa a Guinea también fue revocada por la Sala de lo Penal, en ese caso por la sección segunda.

La Audiencia le recuerda ahora esa decisión y remarca además la contradicción que existe entre la decisión de cerrar el sumario y la de emitir órdenes de detención internacionales.

El juez Pedraz adoptó esa decisión después de que la Sala, también al resolver un recurso de los familiares de los opositores, le advirtiera de que él, como juez de instrucción, no era competente para ceder a Guinea la jurisdicción en esta causa como había acordado en enero, sino que respondía en "exclusividad" a la propia Sala de lo Penal.

Además, el pasado mes de febrero, la Sala le obligó a dictar órdenes europeas e internacionales de detención e ingreso en prisión contra los investigados.

Estos son el hijo de Obiang, actual secretario de Estado de la Presidencia de Guinea Ecuatorial; el director de la Seguridad Presidencial, Isaac Nguema; y el ministro de Estado, Nicolás Obama.

Según la querella presentada ante Pedraz, las cuatro víctimas -el fallecido Julio Obama, Martín Obiang, Bienvenido Ndong y Feliciano Efa- partieron de viaje en noviembre de 2019 desde Madrid a Juba (Sudán del sur), pero fueron retenidos arbitrariamente y trasladados a Guinea Ecuatorial en un avión presidencial para ser encarcelados y torturados.