La iniciativa se lleva a cabo en los arenales de Plentzia, Gorliz y Arriatera-Atxabiribil y los objetos se analizarán para su reutilización

La Diputación de Bizkaia desarrollará este verano una prueba piloto de recogida de juguetes olvidados o perdidos en las playas de Plentzia, Gorliz y Arriatera-Atxabiribil para, una vez analizados, determinar el interés del proyecto y su ampliación a otros arenales vizcaínos.

Así lo han dado a conocer en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno la portavoz de la Diputación Foral de Bizkaia, Leixuri Arrizabalaga, que ha comparecido en rueda de prensa junto a la diputada de Medio Natural y Agricultura, Arantxa Atutxa.

Tal y como han explicado, durante toda la temporada de playas, se recogerán en estos tres arenales elegidos los juguetes olvidados por las personas usuarias o perdidos en la arena y sus residuos.

Posteriormente se almacenarán en un contenedor independiente y, periódicamente, se realizará una caracterización de la composición de las recogidas y se redactarán informes que, al final de la temporada, servirán para "determinar el interés de este proyecto y si se amplía a otros arenales a futuro".

Tal y como ha destacado Atutxa, la Diputación Foral de Bizkaia desarrolla esta prueba piloto en las playas de Plentzia, Gorliz y Arriatera-Atxabiribil, para determinar si, en el futuro, implanta este servicio en la totalidad de los arenales del territorio.

La elección de estas playas para realizar la prueba se basa en que responden a "dos tipologías diferentes" de personas usuarias, lo que permitirá "evaluar con mayor precisión" la necesidad e idoneidad de contar con un servicio de estas características, ha explicado la diputada foral.

Según ha relatado Atutxa, Plentzia y Gorliz son arenales frecuentados por mayor número de familias con niños y niñas a su cargo, mientras que Arriatera-Atxabiribil atrae a un público joven y cuenta con menor presencia infantil.

La prueba piloto consistirá en la recogida de los juguetes olvidados por las personas usuarias o perdidos en la arena y, también de residuos de estos juguetes, recogidos por las máquinas cribadoras.

Posteriormente, cuando la muestra de la recogida alcance un volumen significativo para ello, se realizará una caracterización de la composición de estas recogidas y se elaborará un informe para fijar el resultado del proyecto y ver si se amplía a otros arenales, tomando como base los datos reales reunidos en ellos.

Esta iniciativa se desarrollará a lo largo de toda la temporada de playas de este año y con ella se cumple el mandato emanado de las Juntas Generales de Bizkaia el pasado 16 de abril.