Los sacerdotes de la diócesis de Guadix celebraron la fiesta de su Patrón, San Juan de Ávila, con una jornada en la que hubo de todo: tiempo para la cultura, para compartir la comida y, por supuesto, para rezar. La fiesta de San Juan de Ávila es el 10 de mayo, pero, para facilitar la asistencia, su celebración se ha adelantado al miércoles 8 de mayo.

Comenzó la jornada con una visita al Centro de Interpretación del Megalitismo de Gorafe. En esta zona se encuentran más 240 dólmenes neolíticos diseminados en 10 necrópolis, que la convierten en una de las mayores concentraciones de túmulos prehistóricos de Europa. Con el fin de protegerlos y promocionarlos, en 1998 se creó el Parque Megalítico de Gorafe, que incluye el Centro de Interpretación del Megalitismo. Sin duda, fue una vista muy enriquecedora y que sirvió para conocer más el entorno en que vivimos y el territorio diocesano.

Después, los sacerdotes se desplazaron a Guadix, para rezar ante la Virgen de las Angustias y ganar las gracias del Jubileo, en el Año Jubilar del Centenario de su Coronación, que concluirá en septiembre. Allí, presididos por el obispo D. Francisco Jesús Orozco, rezaron la hora intermedia y cantaron el himno de San Juan de Ávila.

Mons. Orozco, en la homilía habló de la Virgen y de la devoción mariana de San Juan de Ávila, que es Patrono del clero secular español. D. Francisco Jesús recordó algunos textos del santo avilista, al que conoce muy bien por sus estudios y por haber sido párroco en una de las parroquias de Montilla, donde permanecen sus reliquias.

Terminó la jornada con una comida en fraternidad en la Casa Sacerdotal