El delegado del Gobierno en Andalucía, Pedro Fernández, ha negado que exista un conflicto entre España y Gibraltar por una persecución de la Guardia Civil en las aguas en litigio alrededor del Peñón y ha asegurado que fue una actuación desarrollada desde la "colaboración absoluta".

A preguntas de los periodistas durante un acto en Granada, Fernández ha explicado que la Guardia Civil activó a una embarcación del servicio marítimo tras detectar a una de recreo privada que estaba realizando actividades prohibidas de pesca de atún rojo y comenzó una persecución.

El patrón de esa embarcación se refugió en las aguas en litigio que rodean el Peñón, momento en el que se produce "una conversación y una transferencia de información" en la que los agentes explican al servicio aduanero de Gibraltar la situación.

Según Fernández, el servicio aduanero de Gibraltar cogió entonces el relevo para perseguir también a esta embarcación y a su titular y aplicar la normativa que prohíbe taxativamente la pesca de atún rojo en este momento y en esa zona.

"Fue con absoluta cordialidad. A mí los mandos de la Guardia Civil me trasladan que no ha habido ningún tipo de conflicto, ni de enfrentamiento ni de debate al respecto, sino que fue una cosa de colaboración absoluta", ha reiterado Fernández.