La consellera de Innovación, Industria, Comercio y Turismo, Nuria Montes, ha asegurado este miércoles que la reducción de jornada laboral que propone el Gobierno supone una "nueva amenaza" al problema de capital humano de las empresas, es decir, "a la dificultad que hay para encontrar trabajadores y emprendedores". Por eso -ha dicho- "somos tan insistentes en nuestras políticas de empredimiento e innovación, que van muy dirigidas a este tipo de colectivos".

Montes ha realizado estas declaraciones ante los medios tras reunirse en Castelló con la dirección de la Confederación de Empresarial de la Comunitat Valenciana (CEV), donde ha indicado que "una provincia como Castellón, con el mayor índice de industrialización de toda España y un peso de la industria tan importante, requiere de una atención especial del Gobierno valenciano".

"El problema de capital humano tiene un origen socio-demográfico, pero tiene que ser complementado con políticas educativas, con una formación dual en el seno de la empresa que se ajuste prefectamente a las necesidades de los distintos sectores productivos", ha señalado la consellera.

Además, Montes ha subrayado que este problema "cuenta con una nueva amenaza, que es la nueva reducción de jornada laboral que plantea el Gobierno de España, con unas consecuencias tremendamente graves para sectores como el de la cerámica, que trabaja a turnos, y será una decisión que creo que debe contar con el amplio consenso social y con la aceptación y participación de la parte empresarial y no está siendo así".

"Estamos muy preocupados por las consecuencias que una decisión de este calado tiene en un momento en que el nivel de productividad español y valenciano no está en sus mejores valores y que hay un serio problema para incorporar personal a las empresas", ha apuntado la titular de Industria.

Al respecto, Montes considera que esta reducción de la jornada afectará "de manera importante" sobre todo por la competencia de terceros países, "ya que la cerámica tiene una amenaza grande en la competencia de países como India, y esta medida afectará a la competitividad del sector, ya mermada por otro tipo de políticas por la falta ayuda del Gobierno de España". "Los empresarios están francamente procupados por los efectos que pueda tener una medida como esta", ha apuntado.

LA CEV APELA A LA RESPONSABILIDAD DEL GOBIERNO

Por su parte, el presidente de la CEV, Salvador Navarro, ha apelado a la "responsabilidad" del Gobierno "porque en años anteriores se ha demostrado que el diálogo social ha sacado a este país de una situación muy complicada desde los inicios de la democracia", y al compromiso de que "mantenga una negociación abierta con los sindicatos, la propia administración y la patronal, ya que en ocasiones ya hemos demostrado lealtad también a las decisiones que son necesarias".

"Este país tiene un problema de productividad histórico y con esta medida se va a agravar", ha afirmado Navarro, quien ha pedido al Gobierno que replantee la posibilidad de que se siente en la mesa la patronal y se la escuche, "pues en los últimos meses ha habido una omisión absoluta en este sentido".

Navarro ha explicado que la reducción de la jornada laboral, según un estudio de la CEOE, supondrá unos costes salariales de una media de un 6 y medio por ciento, lo que, "en las actuales circunstancias, puede convertir en un serio problema el sector industrial, que ya está lastrado suficientemente, así como al sector de servicios porque este país es de pymes y autónomos, y esto significa una pérdida de productividad y de competitividad".

En cuanto al sector cerámico, ha indicado que significará perder competitividad con respecto a otros competidores como Italia o Francia, "como ha ocurrido en la etapa en que han tenido ayudas directas estos competidores con respecto a los productores españoles".