El fiasco del cuarto anotador de la NBA - Con Basket si hay paraíso

El fiasco del cuarto anotador de la NBA

Corren buenos tiempos para la marca Lebron James pero malos tiempos para el jugador de baloncesto Lebron James. El jugador de los Lakers dado un paso más en su búsqueda de la grandeza, activado por el impulso primario de alcanzar a Michael Jordan desde su más tierna infancia, lo que le llevó a crecer con una gran ambición para alcanzar al mito. Ese icono le ha hecho buscar la excelencia año tras año para ser el mejor jugador posible.

Lebron acaba de sobrepasar a su espectro Michael Jordan como cuarto anotador de todos los tiempos en la NBA, sus zapatillas dedicadas al ídolo con el lema “gracias Michael Jordan” eran una muestra de lo que había significado la figura de Jordan para él. Pero le queda aún lejos la figura de MJ como conquistador de anillos. A Lebron aún le faltan tres dedos de sus manos por anillarse, y la actual temporada le mantiene más lejos que nunca de ese objetivo. A falta de poder optar a un cuarto anillo, James se emociona con el momento histórico que ha vivido la madrugada del jueves en el Staples Center de Los Ángeles, ante Denver Nuggets. James lograba superar a Jordan y convertirse en el cuarto anotador de todos los tiempos; y el partido se paró, Lebron fue homenajeado como corresponde a estas liturgias respetadas en la NBA.

Los fans de los Lakers le adoran, tienen un nuevo referente, una gran estrella, el bombazo que supuso la llegada del Rey tras la retirada de Kobe Bryant, pero aún no saborean el triunfo, aún no son los Lakers, un equipo campeón, un equipo ganador, un equipo que compite por el anillo, en la esperanza de que en la dirección de operaciones Magic y Pelinka llegarán a acertar para dotar a Lebron de un equipo con la suficiente calidad para ser lo que se espera de los púrpura y oro.

James tiene por delante en el ranking anotador tan solo a Kobe Bryant, Karl Malone y Kareem Abdul-Jabbar, tiene a tiro a mil y pico puntos a Kobe Bryant, le pasará, y veremos cuántos años más juega para estar en disposición de alcanzar a Malone y Jabbar, curiosamente todos jugaron en los Lakers. El espigado pívot y leyenda Laker le tiene aún lejos, a más de seis mil puntos, pero Jabbar jugó 20 años y Lebron lleva 16, si sigue jugando a este nivel unos cuantos años como parece el Rey podría convertirse en el máximo anotador de la historia de la NBA.

Son buenos tiempos para la marca Lebron James junto a Hollywood, a punto de empezar el proyecto de la película Space Jam 2, con múltiples negocios alrededor de su presencia en Los Angeles, y sobre todo con su carisma como referente deportivo y social en sus mejores índices. Su carisma y compromiso no se comprueba tan solo en sus palabras, mojándose por la comunidad afro-americana y opinando de manera inequívoca en la búsqueda de la igualdad y la justicia social en su país, sino con hechos. Su proyecto para ayudar a decenas de niñas y niños en su ciudad Akron (Ohio), el proyecto “I Promise”,  muestra a Lebron James como una persona comprometida con su comunidad, con su origen, que quiere aportar algo más que canastas con una obra seguramente  más satisfactoria que un anillo. La atención de Lebron, siendo un enfermo del baloncesto, no se ha limitado a botar la pelota y encestar como le pedía una presentadora de televisión seguidora de Trump. James ha ido más allá, y su carisma va más allá del jugador de baloncesto amado por unos y criticado por otros, toda gran figura tendrá siempre detractores.

Pero es cierto que son malos tiempos para el jugador de baloncesto porque por primera vez en los últimos 14 años el jugador más dominante de la liga se va a quedar fuera de los playoffs salvo milagro, y tras haber disputado las ocho últimas finales de la NBA, en los 13 años anteriores ha jugado plaoyffs. La presencia de James es tan abrumadora en la actual era de la NBA que nadie se imagina unos playoffs sin el Rey, pero la NBA no perdona a aquel que se tuerce en el camino, aquel que no atina en su proyecto. Y los Lakers han errado. Es el primer fiasco para Lebron pero obviamente atribuible a los responsables deportivos de los Lakers en la confección de la plantilla.

James tampoco está a su mejor nivel, que lo estuviera después de la acumulación de partidos y minutos que lleva en los últimos años no acabaría de ser normal, pero lo hubiera podido conseguir en un equipo más competitivo. Los Lakers no han conseguido ser un equipo defensivo que supiera jugar en transición, ni tampoco ha asociado a Lebron a ninguna otra estrella como pretendía para ser un equipo ganador. Quedarse fuera de los playoffs puede suponer o un retorno a lo bestia de Lebron en próximos años o bien el inicio de su declive. ¿Cuál de las dos opciones será?

 

 

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