Explosión ÑBA para empezar la temporada

No llevamos ni un mes de competición en la NBA,  pero los jugadores españoles ya han dejado algunas de sus mejores actuaciones, especialmente por lo que se refiere a Niko Mirotic, Serge Ibaka, Álex Abrines y Juancho Hernangómez. En tan solo tres semanas de competición el talento de nuestros jugadores se ha puesto de manifiesto. En un arranque de temporada de liga verdaderamente espectacular en la NBA, con puntuaciones altas, con ritmo vertiginoso de juego de muchos equipos, en plena fiebre del triple, en una nueva era, tendencia al ritmo que han ido marcando en los últimos tiempos los Warriors y los Rockets, los jugadores españoles o los nacionalizados Ibaka y Mirotic se mueven como pez en el agua, la explosión ÑBA es un hecho en este arranque.

Jugadores que aprovechan muy bien los espacios para desarrollar su mejor juego, Niko Mirotic empezó a un ritmo impresionante con gran nivel de efectividad y gran anotación en unos Pelicans que empezaron como motos y que ahora se han visto frenados; Serge Ibaka, antaño dominador de la pintura y fiera intimidatoria del aro, se ha ido alejando cada vez más hacia nuevos territorios, hace tiempo que ha evolucionado hacia un jugador cómodo en la distancia, capaz de jugar abierto, muy fiable en el tiro de larga y media distancia. Su destrozo a los Lakers el otro día aún está en la retina de los inquilinos del Staples Center, 34 puntos y 10 rebotes sin fallo en los primeros 14 tiros. Ibaka está jugando no sabemos si a su mejor nivel desde que llegó a la NBA, porque ya fue el mejor taponeador de la liga, pero sí es de los mejores interiores de nuevo cuño y la mejor versión del nuevo Ibaka, en un equipo que ha arrancado arrollador, Toronto Raptors.

Juancho Hernangómez había ido alternando días notorios con desaparición del equipo en la temporada pasada, y cuando parecía tener la misma inercia en este arranque, ya ha dejado claro que su rol puede ser mucho más importante en unos sorprendentes Denver Nuggets, que sin duda son en estas primeras semanas las revelación, segundos del Oeste con una sola derrota tras los Warriors. Juancho anotó 23 puntos tras no haber jugado en el partido anterior y dejó unas declaraciones modélicas que han sido repetidas en todas partes como ejemplo del sentido de equipo, del equipo por encima del yo. Juancho permanece abierto para los tiros, corre para defender, ha puesto tapones decisivos, activo en unos Nuggets en el que el mundo pivota alrededor de un interior que es de todo, Nikola Jokic, un librepensador de la pintura que hace triples-dobles y que es capaz de repartir 16 asistencias siendo un pívot,  como ante Utah. En Denver también ha explotado Murray con 48 puntos a los Celtics, pero es que este arranque liguero en general es una exhibición permanente, Curry, Klay, Rose, Murray… cuántas exhibiciones. Rara es la noche que no la arma algún jugador, las anotaciones están por las nubes en una era marcada por los grandes tiradores, los pívots móviles o las transiciones.

Y luego está lo de Abrines. Álex ha conseguido también su máximo en la NBA con 25 puntos ante Charlotte, con 5 de 10 en triples. La cuestión no sólo fue numérica para el de Oklahoma City Thunder, sino cualitativa. Abrines no sólo tiró triples bien, preparado en la esquina o en la diagonal hacia el aro abierto para descargar a Westbrook, George o Denis Schroeder, sino que pasó bien la bola, defendió bien, y el entrenador Billy Donovan entendió la importancia que tenía el jugador en el partido para darle muchos minutos y los minutos de la verdad. Abrines hizo posible la remontada ante los Hornetts. Este partido debe marcar un antes y un después para Abrines en cuanto a su papel en los Thunder, sabíamos que Abrines puede hacer mucho más que ser un especialista esperando su momento para el tiro, pero para ello tenía que trabajar, fortalecerse, ser un jugador importante en defensa y sobre todo que el balón pase más por sus manos. Westbrook, el líder del equipo, le tiene confianza, pero tanto él como Paul George son quienes amasan más balón. Sin embargo parece que este año los Thunder quieren ser mejores en defensa, correr más y ser más dinámicos en ataque en lugar de amasar tanto el balón.

Pocos jugadores son tan nobles como Abrines en el juego, siempre dispuesto a ayudar, siempre dispuesto a vigilar el lado débil, sabiendo interpretar el juego, no ha sido altivo en ningún momento buscando más importancia en el equipo.

Hay una coincidencia en todos los ÑBA, y es que han podido trabajar mucho más el aspecto físico, llegan mucho más fuertes. Han trabajado y se nota.  En plena explosión del juego abierto, los jugadores españoles están demostrando estar en su hábitat, falta por saber qué pueden dar de sí algunos proyectos. Ricky Rubio dio su mejor versión la pasada temporada en Utah en un equipo sorprendente, que en este arranque aún se muestra algo irregular en un equipo que aún no arranca. El base ha combinado noches de distinto éxito, y aunque ha dejado algunas buenas anotaciones aún puede llegar su mejor versión. Su conexión con Rudy Gobert es una garantía y sigue siendo un gran defensa y mejorando en el triple, ya no es el jugador al que flotan a conciencia porque ahora es amenaza. Aunque aún deben encontrarse en esta temporada.

En su 17ª temporada NBA Pau Gasol tiene a sus 38 años un papel mucho más concreto, más cualitativo que cuantitativo, sus minutos deben ser de calidad, y como quiera que los Spurs mantiene un juego más tradicional menos abierto al triple y con más uso de la media distancia, Pau Gasol está dando buenos minutos a su equipo desde el banquillo, se le ve bien físicamente, y San Antonio tiene mucho interés en ser competitivo, un desafío para Popovich en la era post big three Parker, Duncan, Ginóbili, y también post Kawhi Leonard.
Marc Gasol  Memphis Grizzlies es un hacer lo posible por seguir siendo un jugador importante a pesar de estar en un equipo con serias dificultades para luchar por objetivos pero que ha empezado bien, con balance positivo, pero Marc puede ser jugador de traspaso en cualquier momento y su ánimo debe ser mantener su gran nivel, estar preparado para seguir siendo relevante, sea en su actual equipo o sea en otro con aspiraciones llegado el caso. José Manuel Calderón a sus 37 años es nuestro otro gran patrimonio nacional en la NBA tras Pau Gasol, son muchos años de carrera en la mejor liga del mundo, y dispuesto como el primer día a ser útil a su equipo, por ahora con menos minutos en Detroit Pistons.

Willy Hernangómez está en un equipo en reconstrucción, en el que se rumorea que su estrella Kemba Walker puede salir como pieza codiciada de mercado .En cualquier caso el mayor de los Hernangómez se está trabajando su papel en una franquicia en la que parece encontrarse a gusto.

Los ÑBA nos van a seguir dando grandes noches en una gran temporada NBA.