La cafeína, menos grasa y más rendimiento
¡Muy buenos días!
Seguro que no somos los únicos que lo primero que hacemos nada más levantarnos es tomarnos una buena taza de café para empezar el día con energía. Y es que es sabido por la mayoría de nosotros que la cafeína es uno de los suplementos alimenticios por excelencia en el ámbito deportivo.
La cafeína, una vez consumida, se absorbe y tarda entre 20 y 45 minutos en llegar al torrente sanguíneo, de donde pasará sin dificultad al cerebro y donde alcanzará su pico máximo una hora después de ser ingerida.
Una vez allí, actúa sobre el sistema nervioso central, produciendo una serie de efectos estimulantes que nos ayudarán a aumentar el rendimiento deportivo.
Pero además tiene otros beneficios:
– Reduce la fatiga, nos pone en estado de alerta y aumenta la concentración.
– Aumenta la oxidación de las grasas durante el ejercicio de intensidad moderada ya que reduce la dependencia de la utilización del glucógeno.
– Reduce la percepción del esfuerzo, lo que nos puede ayudar a soportar entrenamientos de intensidades más altas, mejorando así nuestro rendimiento.
– Ayuda a una recuperación más rápida ya que también mejora la reposición de los músculos después del ejercicio.
– Además, influye en la absorción de minerales como el calcio y el sodio, fundamentales si haces deporte.
Sin embargo, como con casi todo, siempre hay una dosis que no deberíamos sobrepasar ya que podría acarrear efectos negativos en nuestro organismo, temblores, somnolencia, o irritabilidad son lo más comunes.
Los beneficios de la cafeína aparecen al ingerir entre 1-3 mg/kg de peso, y nunca sobrepasar los 6mg/kg.
¡Feliz día!
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Interesante sería saber en qué parte de la Edad Media nos encontraríamos aún de no haber entrado la cafeína en el mundo desde el comienzo del la Edad Moderna…
Los monjes que fueron los primeros en Europa en sacarle provecho, lo consumian porque les permitia mayores vigilias…para rezar.Luego se le sacó «más jugo».
Interesante sería saber en qué parte de la Edad Media nos encontraríamos aún de no haber entrado la cafeína en el mundo desde el comienzo del la Edad Moderna…
Los monjes que fueron los primeros en Europa en sacarle provecho, lo consumian porque les permitia mayores vigilias…para rezar.Luego se le sacó «más jugo».