Railway Empire: ¡Pasajeros al tren!
¡Hola, gameLover! En cuestión de videojuegos tenemos simuladores de todo tipo: de coches, de aviones, de granjas e incluso de la vida… ¿por qué no uno de trenes? Ahora llega Railway Empire, un simulador ferroviario que arranca su viaje inaugural en PS4, Xbox One y PC. ¡Todos a bordo!
Lo de jugar a los trenes nos queda ya muy lejos, y tal vez más a mí que a ti, porque en realidad la experiencia más cercana que he tenido a jugar en la vida real con cosas así fue con Kitt o con el circuito de Scalextric de mi hermano… Seguro que tú eres más amante de los trenes y por eso has llegado hasta aquí, aunque yo no he querido dejar pasar la oportunidad de probar la sensación de ser, no sólo el jefe de estación, sino el jefe absoluto de mi propia red ferroviaria. ¡Muahahaha! (léase con auténtica entonación de villano Disney).
Railway Empire nos pone a los mandos de una auténtica revolución industrial encabezando una de las compañías pioneras de la industria ferroviaria en Estados Unidos en un periodo histórico que arranca en 1820. El marco es ideal para un entorno así, pero no busques un gran argumento de época o personajes profundos, porque no los encontrarás. Lo que sí que conseguirán que estés pendiente de su historia, que se presenta de una forma didáctica y bastante entretenida mediante secuencias animadas que introducen cada capítulo con una buena narración en nuestro idioma y que nos explican los avances de esta industria. Argumento simple, pero entretenido.
El modo campaña es el que nos va a permitir un desarrollo más jugable, donde empezaremos las misiones en un periodo concreto, con una ciudad y su estación ya construida y una serie de objetivos a superar, que te sirve para ubicarte en la época y también para introducirte en el entorno para después permitirte una libertad más completa a la hora de gestionar todas las opciones y recursos del juego de la manera más absoluta.
Al final no deja dejas de ser el gestor de una compañía, por lo que es importante que tomes buenas y estratégicas decisiones. Eso sí, acostúmbrate a que la mayoría del tiempo vas a estar construyendo vías de tren para expandir tu imperio por todo el terreno y con la finalidad de crear tu propia red. Cuanto más crezca tu empresa y más compleja se vuelva tu obra, más consideraciones tendrás a tener en cuenta. Eso se traduce en más opciones para hacer frente a nuestros adversarios, por lo que el juego está creciendo constantemente.
Lo curioso es que tus rivales -las otras compañías de la competencia- no tienen en cuenta la manera en que progresas en el juego, porque su expansión es completamente independiente a las decisiones que hayas podido tomar, lo que lo convierte en un inconveniente en algunas ocasiones. Es una inteligencia artificial un tanto torpe -aunque fácil de capear- que en ocasiones puede llegar a distraerte en tus objetivos.
Lo que es digno de destacar es la gran calidad gráfica que posee este juego, con una serie de detalles muy cuidados. Desde los menús, hasta la sencillez en los que estos se presentan, con un estilo artístico mimado en cada objeto, terreno, edificio o paisaje, incluidas las animaciones de las locomotoras, que serán la delicia de los fans de todo lo ferroviario. El juego también tiene un buen número de modos de juego con los que entretenerse y saciar al jugador más exigente del género.
Railway Empire no es mecánicamente complejo, y tampoco el más completo. Eso sí, es el que mejor ha buscado una forma de eliminar todo lo superfluo en este tipo de juegos para completar una experiencia con el suficiente potencial para que lo podamos entender, aprender y jugar de una forma sencilla. Y si optas por su edición física también podrás disfrutar de su banda sonora, de un póster panorámico y del manual impreso.
Por cierto, ¿sabes quién se lo pasaría genial con este juego? Sheldon Cooper, un gran amante de todo lo ferroviario.
Railway Empire se publicó el 26 de enero por Kalypso en PS4, Xbox One y PC y se distribuye en formato físico en España por Meridiem Games
