Los videojuegos también salvan vidas
Estamos viviendo la mejor época de los videojuegos. La evolución de la tecnología y la madurez que ha alcanzado el medio han conseguido la mezcla perfecta para el disfrute de niños y mayores. Todos aquellos que invertimos nuestras monedas en las recreativas hemos sido testigos del increíble cambio que ha sucedido. Los píxel se han transformado en caras, completamente definidas, que transmiten emociones y que permiten una conexión basada en la empatía entre jugador-protagonista. El escenario es completamente interactivo y podemos visitar otras ciudades y mundos de ciencia ficción. Los videojuegos permiten que liberemos tensión y nos hacen felices. Sí, están cargados de efectos que hacen que nuestro cerebro secrete dopamina, la hormona de la felicidad.
Pero todo tiene su cara oculta. Durante los últimos años los videojuegos están siendo tratados como algo negativo. Es rara la semana que no se lee o se escucha en algún medio generalista que alguien ha matado o que se ha suicidado. El estigma llega con una coletilla muy familiar: “jugaba a videojuegos”. No sé muy bien si es para llamar la atención con un titular al que ya parecemos inmunes o si realmente es relevante para la noticia. Seguramente la persona protagonista del suceso también bebía agua del grifo o hacía cualquier otra cosa irrelevante en su vida.
Hace unos días me llegó una noticia de esas que no van a salir en los periódicos, una que no veremos en las noticias a la hora de comer o mientras cenamos. Los videojuegos pueden salvar vidas. Si no conocéis Hellblade: Senua’s sacrifice os pongo en situación. Este título desarrollado por Ninja Theory nos transporta a una época dominada por los dioses vikingos. Nos ponemos en la piel de Senua, una guerrera celta que se aventura hacia el inframundo vikingo de Hel. Todo lo hace para salvar el alma de la persona a la que ama, así podrá descansar en paz. Hasta ahí todo correcto, no parece nada más allá de un videojuego convencional con una historia interesante. Pero no es así, Hellblade es mucho más. Según avanzamos en la historia descubrimos que la joven protagonista sufre de psicosis. Un trastorno mental que hace que escuche voces en su cabeza y que vea cosas más allá del mundo real. El juego nos demuestra que estas personas también pueden ser auténticos héroes.
Y esto nos encauza hacia una maravillosa noticia. Jessica Prime es la madre de un joven que ha descubierto que existe la esperanza, que todo tiene arreglo y que buscar ayuda es la mejor salida. Que si no entiendes lo que te pasa, siempre habrá algo que pueda servirte para comprenderlo y a adaptarte. Esta madre está realmente agradecida al juego desarrollado por Ninja Theory. Su hijo tenía un plan para quitarse la vida, tras jugar a Hellblade le llegó un poco de luz, descubrió un camino que estaba ensombrecido. Estas son las palabras que la madre ha dejado en Twitter:
Thank you, @NinjaTheory, for Hellblade: Senua’s Sacrifice. It saved my son’s life. After playing it through, he asked to go to the hospital for help. He couldn’t take everything he’d been dealing with & had a plan to kill himself. The game changed his plan. Thank you. ❤️
— Jessica Prime (@FaerieGlamour) 12 de agosto de 2018
“Gracias, NinjaTheory, por Hellblade: Senua’s sacrifice. Ha salvado la vida de mi hijo. Después de jugarlo, pidió ir al hospital para recibir ayuda. Él no podía afrontar todo lo que había estado pasando y tenía un plan para suicidarse. El juego cambió ese plan. Gracias”.
El título creado por Ninja Theory ya es todo un estandarte contra el estigma de la enfermedad mental. Hellblade fue el gran triunfador de los BAFTA, se llevó nada menos que cinco galardones. Entre todos los premios que ostenta se ha ganado, con razón, el BAFTA: Award for Game Beyond Entertainment y en The Game Awards: Games for Impact. Esto quiere decir que la profundidad y lo que se quiere mostrar con el título va más allá del juego convencional. Se ha abierto una ventana para dar a conocer una enfermedad muy machacada por la sociedad. Una ayuda para la concienciación y que ha abierto la veda para el conocimiento de la situación en un medio imparable como esta industria.
Maravillosa historia. Todavía estoy deseando ver un titular en el que se saque el lado positivo de todo esto. Un: «Ha decidido buscar ayuda, no va a suicidarse, jugaba a videojuegos».