Esperanza
Esta es la razón que nos permitirá seguir adelante. La vida está llena de oportunidades, a pesar de la pandemia, el año 2021 tiene que ser el año de la ESPERANZA, ganaremos esta batalla, pero no podemos quedarnos con los brazos cruzados esperando que otros nos resuelvan nuestro problema.
La vacuna es muy importante, pero el Gobierno tiene que ponerse en marcha para ayudar a los que se han quedado en la ruina más absoluta, las colas del hambre tienen que desaparecer, hay que ayudar a las pequeñas y medianas empresas, a los que tuvieron que cerrar sus negocios y también a las familias que viven gracias a las pensiones de sus mayores.
Los jóvenes tienen que respetar las medidas que sean necesarias para acabar con los contagios. Las autoridades sanitarias nos anuncian una ola más devastadora que la anterior y piden prudencia, los hospitales ya no pueden recibir más enfermos, los sanitarios están agotados, las UCIS están llenas de personas de todas las edades que se debaten entre la vida y la muerte….
Juan Pablo II en su visita a la redacción de un diario, pidió: “que haya siempre junto a quien sufre un corazón capaz de amar”.
La humanidad necesita esperanza, esperanza que el Papa Francisco nos pide en unos momentos en los que él también está sufriendo….
Somos hijos de Dios por voluntad del padre. Dios es nuestra esperanza, cuando el hombre se aparta de Dios y prefiere vivir en la mentira, se hace esclavo de la muerte. Pidamos a Dios que en estos momentos ilumine nuestros corazones.
La catástrofe de esta época es que el hombre se ha alejado de Dios, el pecado es la ruina del hombre, el hijo de Dios ha sido expulsado y crucificado por nosotros.
El obispo de Córdoba, en su homilía del domingo nos ha recordado que estamos en Navidad y que celebrar la Navidad es celebrar la Esperanza.