Oña
Este pequeño pueblo de Burgos te llevará a murallas, a puertas medievales… y a un monasterio en el que pararse a recargar pilas. ¡Que el frío no te detenga! ¡Arrancamos!
Y lo hacemos en el Real Monasterio de San Salvador de Oña que alberga los restos tanto de los últimos Condes de Castilla como los de los primeros monarcas castellanos. Fundado en 1011 por el conde Sancho García en honor a su hija, de él nació el Señorío Infantado más importante de Castilla. ¿La joya de este edificio? El panteón real y condal. Nichos construidos en madera tallada en estilo gótico mudéjar cerrados sin puntas ni clavos. Tampoco te pierdas su claustro gótico y su órgano barroco.
Si sales del edificio justo al lado se encuentra el Jardín Secreto. Son los antiguos jardines benedictinos, pegados al templo, reconvertidos hoy en un espacio de divulgación artística.
Los vecinos de Oña están muy implicados con su pueblo y prueba de ello es que todos los años representan el llamado ‘Cronicón de Oña’. A mediados del mes de agosto el pueblo entero se echa a la calle para narrar los orígenes del Reino de Castilla. Todavía no están a la venta pero puedes ir pensando en comprar las entradas. Más información sobre ellas AQUI.
Otros lugares de interés…
Nada como perderse dando un pequeño paseo por Oña que ha sabido conservar su aire medieval en calles como la de Barruso y en la Antigua Judería. Acercarse a su plaza mayor, pegada al monasterio, a la Torre de San Juan, a sus casas blasonadas o a la iglesia parroquial de San Juan. Y si lo tuyo es patear puedes decantarte por alguna de las rutas de senderismo. Encontrarás información en la llamada Casa del Parque.
¿A qué esperas para acercarte a este pueblo de Burgos?