El año de Alejandro Valverde
Alejandro Valverde pedalea de victoria en victoria hacia la gloria final. 2018 es su gran oportunidad para ganar el oro mundial.
Pasan los años y Alejandro Valverde sigue sumando triunfos a una magnífica carrera deportiva que, de momento, no tiene fin. Como el buen vino, el ciclista murciano va mejorando temporada tras temporada. Una caída en el Tour de Francia de 2017 hizo temer lo peor. Su rodilla quedó muy dañada, pero se recuperó antes de lo normal. Valverde está hecho de otra pasta. Que te lesiones de gravedad, te recuperes en medio año y vuelvas a ganar solo lo puede hacer él. Ya suma 116 victorias en su carrera profesional (a día 26 de marzo de 2018). Con total seguridad aumentará esta cifra próximamente. Su ambición no tiene límites. El 25 de abril cumplirá treinta y ocho años, pero viéndole subir puertos parece que tenga poco más de veinte.
En lo que va de 2018, Alejandro Valverde ha ganado tres Vueltas: Valencia, Abu Dhabi y Cataluña. Y además ha sumado cinco triunfos de etapa, dos en Valencia, una en Abu Dhabi y dos en Cataluña. Tras ganar en la Volta ha dicho que “el hambre de ganar no se acaba nunca” “me gusta mucho el ciclismo, es mi pasión y no me cuesta entrenar”. De hecho, ha declarado que le gustaría llegar a los Juegos Olímpicos de Tokio que se celebrarán en 2020.
Valverde ha sido podio en las tres grandes Vueltas ciclistas. Ha ganado una vez la Vuelta a España. Campeón en varias ocasiones de clásicas como la Lieja-Bastoña-Lieja o la Flecha Valona. Cuatro participaciones en Juegos Olímpicos. “El Bala” ha sido seis veces medallista en campeonatos del mundo. Pero le queda una espina que sacar. Después de quedarse a las puertas en dos ocasiones en las que ha sido plata mundial, busca el oro, el que sería el colofón perfecto a una carrera deportiva excepcional.
Parece que 2018 es la última gran oportunidad para que lo logre. Será el 30 de septiembre cuando Alejandro Valverde luche por el objetivo que se le ha escapado en varias ocasiones. El Mundial se celebrará en Innsbruck (Austria) y el recorrido le viene que ni pintado. Serán 265 kilómetros con seis vueltas (23,9 km) a un circuito con continuas subidas y bajadas. Habrá casi 5.000 metros de desnivel y una última subida de 2,8 km al 11,5% y rampas de hasta el 25%. Una bestialidad al alcance de los más fuertes del pelotón internacional, para escaladores como Valverde. Su magnífica carrera deportiva merece una victoria mundial que le termine de encumbrar a las alturas de los ciclistas más grandes de la historia.
FOTOS: MANEL MONTILLA (MUNDO DEPORTIVO) Y WEB OFICIAL MUNDIAL 2018