‘Varda por Agnès’: llega al cine otro impecable testamento fílmico de una de las mejores narradoras de la nouvelle vague
¡Mis queridos palomiteros! ‘Varda por Agnès’: otro impecable testamento fílmico. Hoy, 5 de julio, los cines españoles acogen el estreno del atractivo documental biográfico francés Varda por Agnès, dirigido y escrito por la propia cineasta belga, Agnès Varda, fallecida en marzo pasado a los 90 años, y distribuido por A Contracorriente Films, donde la realizadora de Cléo, de cinco a siete (1962), narra lo que podría ser su testamento fílmico.
Varda por Agnès es un documental único e impredecible de una directora de cine fascinante. No dejen de leer el ajustado trabajo de Pilar Carrera y Jenaro Talens sobre el relato documental, del que ya hemos hablado desde estas pantallas.
Su nuevo trabajo arroja luz sobre su experiencia como cineasta, donde aporta una visión muy personal de lo que ella llamaba “escritura de cine”. O lo que es lo mismo: Pasión y sabiduría en toda una lección de cine. Estamos, de nuevo, ante una excelente carta de presentación para los recién llegados y un maravilloso regalo de despedida para los fanáticos de toda la vida, incapaz de dejar indiferente al respetable.
‘Varda por Agnès’: otro impecable testamento fílmico
Presentado con éxito en Berlín, en Varda por Agnès a lo que se asiste es a una clase magistral sobre el séptimo arte. Pero una clase magistral en el sentido total de la historia, donde la oscarizada realizadora diserta sobre toda su vida sin pelos en la lengua. Y lo hace desde el presente, cuando ya cuenta con 90 años.
La puesta en escena, casi en su totalidad y a su vez como eje que estructura la película, se ambienta en un despacho donde un plano fijo va recogiendo sus testimonios, muchos de ellos desconocidos, pero expuestos con una sencillez, calidez y naturalidad apabullantes.
En este sentido, y haciendo uso de una gran creatividad, un gran ejercicio de imaginación y de genialidad, en el resultado final del montaje, esta impulsora de la Nouvelle vague tiene aún ganas de hacer nuevos trabajos a pesar de lo avanzado de su edad.
En este recorrido autobiográfico le da tiempo a todo. Explica su pasión por la fotografía y la reacción de los que salen fotografiados a quienes muestra las fotos en la calle, por ejemplo. También recuerda a su marido, el director de cine Jacques Demy y el amor que los unió dentro y fuera de la pantalla. Al tiempo reconoce su etapa de activista femenina en los años 60 y asegura que no le tiene ningún miedo a las críticas, bien sea por su trabajo, bien sea por su vida privada.
La cineasta belga destaca el comportamiento de grandes intérpretes del cine con los que trabajó, como Robert de Niro o Catherine Deneuve
El cine de Varda, que siempre se ha caracterizado por su tono de experimentación contrasta con lo convencional del formato elegido para narrar su vida, si bien es cierto que es la manera más directa de llegar a todos los públicos. Como es natural, el filme contiene retales de imágenes en blanco y negro, y en las casi dos horas que dura el documental, el amor al cine es la constante que mantiene la veterana directora.
Ciertamente expone otras vivencias, que son una retahíla de películas en las que afronta por qué las rodó y por qué en esos momentos, al tiempo que destaca el comportamiento de grandes intérpretes del cine con los que trabajó, como son Robert de Niro o Catherine Deneuve a quienes vimos en Las cien y una noches (1995).
Un aspecto que ha de destacarse es la sencillez y la humildad con que la protagonista de su filme despliega todos estos acontecimientos, si alharacas ni bombo. Siempre con una sonrisa dispuesta a brotar, incluso cuando la invadía la infelicidad.
En fin, Varda por Agnès, igual que hizo el desaparecido director de cine portugués Manoel de Oliveira, que en 1982 dejó filmado un documental sobre su vida, y que exigió que sólo fuera proyectado tras su muerte, Visita ou Memórias e Confissões, resulta un regalo para los espectadores.
No sólo porque van a saborear el cine de mano de una de sus mejores embajadoras, sino porque también es ejemplo de una vida vivida con pasión y entusiasmo, pero comunicada con el sosiego y la serenidad que sólo dan la sabiduría y la experiencia adquirida. No dejen de verlo, les va a fascinar.