Piensa lo que quieras, pero ya sabes que el amor que siento por ti es ‘Incondicional’
¡Mis queridos palomiteros! ‘Incondicional’: Excelente debut biográfico de Brent McCorkle sobre la fe. Este joven cineasta, que además se ha encargado de musicalizar la historia y de escribirla, ya había realizado varios cortometrajes, entre ellos The Rift, con el que ganó en 2009 el festival online Doorpost Film Project.
Incondicional -basada en hechos reales- sigue los pasos de Samantha Crawford, interpretada por Lynn Collins (X-Men orígenes: Lobezno, Gavin Hood, 2009), una mujer con una vida perfecta. Está felizmente casada y trabaja en lo que siempre ha soñado, las historias que inventaba e ilustraba en su infancia ahora se han transformado en libros publicados. Pero su idílica vida se ve truncada cuando asesinan a su marido Billy.
Sam pierde la esperanza e ilusión de vivir. Un día, al ayudar a dos indefensos niños en la calle, se reencuentra con Joe, al que da vida Michael Ealy (Siete almas, Gabriele Muccino, 2008), un amigo de la infancia al que no veía desde hace años.
Actualmente apodado “Papá Joe”, se ha convertido en el protector de los niños del empobrecido barrio en el que vive. La positiva actitud de su antiguo amigo le hace reflexionar y darse cuenta que a pesar de que ella renunció a la fe, ésta nunca le abandonó y puede llegar a ser la solución a todos sus problemas.
‘Incondicional’ es otra propuesta vigorosa para hacer las paces con Dios
Tal y como nos tiene tan bien de acostumbrados European Dreams Factory, Incondicional resulta otra emocionante y elogiosa radiografía del alma humana –ya lo había demostrado Intocable-, que goza de pulso firme y de interpretaciones convincentes donde vuelve a ponerse en el tapete, con inteligencia y sin discursos ñoños, un drama actual, con suspense incluido, sobre la superación humana, a partir del renacimiento de la fe en un momento insólito.
‘Incondicional’: Excelente debut biográfico de Brent McCorkle sobre la fe
Además, McCorkle pondera los detalles sustanciales del filme, los de sentimientos encontrados, y hace que el engranaje de la historia funcione bien debido a un intenso trabajo en el guión -principalmente en sus transiciones dramáticas-, el montaje y la sutil incidencia de la banda sonora cuando es necesaria.
Por si fuera poco, McCorkle también domina el uso del color del que se sirve para subrayar la calidez que se percibe en el santuario, por ejemplo, con los matices fríos de las calles destartaladas. Y consigue con ese contraste crear atmósferas suficientes y creíbles. A todo ello contribuye un buen elenco que cumple a la perfección con sus roles.
Incondicional es, pues, otra propuesta vigorosa para hacer las paces con Dios en los momentos duros y para aprender a crecer en la adversidad, puesto que los resultados definitivos terminan por completar del todo a la persona humana.
Se agradece y se necesita, además, esta brisa fresca, que empuja al panorama audiovisual extranjero, que también siente y necesita dar salida a todas sus inquietudes.