Almagro celebra hoy el estreno de ‘El monstruo de los jardines’, con la maravillosa Ania Hernández al frente del reparto
¡Mis queridos palomiteros! Ania Hernández también brillante en ‘El monstruo de los jardines’.
Como sabéis, estos días y como cada año, se está celebrando una de las más celebradas fiestas del teatro. Más en concreto me refiero a la 47 edición del Festival Internacional de Teatro Clásico de Almagro que, como sabéis, es un encuentro con los amantes de las artes escénicas de una gran repercusión. Un icono en el panorama teatral reconocido en todo el orbe que arrancó su programación el 4 de julio y que se extenderá hasta el día 28.
Ania Hernández también brillante en ‘El monstruo de los jardines’
Pues bien, hoy, 19 de los corrientes y hasta el 28 de julio, regresa a los escenarios El monstruo de los jardines. Esta vez se podrá ver en el Teatro Adolfo Marsillach a las 22.45 horas. Se trata de una filigrana calderoniana que permaneció en cartel casi dos meses en el Teatro de la Comedia de Madrid, sede de la CNTC, donde se escenificó su estreno absoluto a cargo de la Joven Compañía.
El éxito del trabajo se sus integrantes viene de largo. El año pasado los intérpretes ya dieron buena muestra de sus altas capacidades con la puesta en escena del musical lopesco La discreta enamorada, que dirigió Lluís Homar. Estos chicos, lo digo ya, están apuntando muy buenas maneras.
De la pieza calderoniana, podríamos decir que se inspira en el episodio de Aquiles en Sciros, cuando es escondido por su madre, la ninfa Tetis, en la corte del rey Licomedes, disfrazado de mujer para que no se cumpla la profecía de su muerte en Troya.
Calderón pone el mito al servicio de sus inquietudes filosóficas y convierte a Aquiles en Segismundo. Así, vemos al héroe en ciernes saliendo de la cueva en que su madre lo ha tenido encerrado quince años, prácticamente naciendo al mundo, y lo seguimos en un viaje iniciático, a través de las mieles y las hieles del amor, hasta atisbar el héroe que será en Troya.
La comedia mitológica y antibelicista se convierte en un vibrante, frenético y fresco ejercicio visual de plástica escénica -puesta en escena, vestuario, espacio escénico y sonoro- e interpretativo, entre otros hallazgos, como pocos trabajos pueden presumir
Las comedias mitológicas de Calderón representan el culmen del teatro barroco como fusión de las artes, y la maravilla de los versos que encierra este Monstruo de los jardines reclaman que la situemos entre las obras cumbre de don Pedro.
Al margen de si la idea del montaje es aproximar al público menos especializado en Calderón, el asunto es que Iñaki Rikarte le ha dado una vuelta de tuerca a la propuesta bien amplia e interesante, de modo que la comedia mitológica y antibelicista se convierte en un vibrante, frenético y fresco ejercicio visual de plástica escénica -puesta en escena, vestuario, espacio escénico y sonoro- e interpretativo, entre otros hallazgos, como pocos trabajos pueden presumir.
Por todo ello, no es extraño que el espectáculo haya sido el más reconocido en la III edición de los Premios Godot donde se alzó con cuatro galardones, celebrados el pasado 10 de junio en Madrid y organizados por la Revista Godot, que apoya, promueve y difunde desde hace 15 años con gran profesionalidad y empeño el desarrollo de las artes escénicas.
Por otro lado, ha de ponerse en valor el talento de Rikarte al introducir en la historia militares, mariachis, periodistas y sus ruedas de prensa; elementos que a primera vista podrían distraer la naturaleza propia de la pieza de Calderón y que, muy al contrario, amplifican y actualizan el montaje con grandes dones. Es decir, que si ya triunfó El monstruo de los jardines en el Siglo de Oro, el éxito sigue en el siglo XXI.
Finalmente, y sin hacer spoiler del ejercicio actoral del mencionado montaje, quiero poner en valor el esfuerzo y la calidad interpretativa de Ania Hernández, protagonista absoluta, que como en trabajos pretéritos de otro estilo e intenciones, sigue demostrando su talla como actriz de talento indiscutible. Cuando la veáis comprobaréis a qué me refiero. Vais a disfrutar infinito. Muchas gracias a todos por tanto.