Mi dieta de la fashion week: día 3
Menos mal que no tenía un sacacorchos a mano, que si no, posiblemente me habría bebido la botella de vino que le regaló Amaya Arzuaga[...]
Menos mal que no tenía un sacacorchos a mano, que si no, posiblemente me habría bebido la botella de vino que le regaló Amaya Arzuaga[...]