Kim Kardashian lleva su Mercedes-Benz a juego con su ropa
Hoy en “problemas del primer mundo”: qué hacer cuando te regalan un Mercedes-Benz SUV de 240.000 dólares pero te cuesta entrar en él. Por partes. El cantante Kanye West le ha regalado un Mercedes-Benz G-Class SUV en tono verde neón a su mujer Kim Kardashian, nada más y nada menos que porque esta se enamoró del color del coche (como quien se enamora del color de un bolso) y sin preocuparse en la funcionalidad del vehículo.
La pareja había alquilado este mismo modelo de coche en su reciente escapada a Miami. Fue entonces donde la famosa entendió que «le flipaban los tonos neón», según contó ella misma en su cuenta de Instagram. El caso es que el vehículo iba a juego con el vestido de látex en el que se enfundó para acudir a la boda de unos amigos.
El drama vino a la hora de subirse a la tanqueta psicodélica. El coche es tan alto que la famosa necesitó la ayuda de su marido (que la cogió en brazos) a la hora de meterse en el asiento del conductor, porque el vestido tubo que llevaba no le permitía abrir las piernas lo suficiente para subirse. Y ahora que tiene el mismo modelo ya en su poder en Los Ángeles, regalo de su marido, sigue teniendo también el mismo problema.
Menos mal que está su hermana Kylie para darle trucos sobre la manera correcta de entrar en dicho vehículo. Y es que la pequeña de las Kardashians posee el mismo coche, en color naranja. Los deben regalar en Calabasas (California). El caso que es han estado toda una mañana practicando la subida, sin arnés de seguridad, para estudiar la manera más estética de escalar al tractor deluxe. Lo que tenéis que entender es que puede haber paparazzi haciendo fotos en dichas subidas y por ello las hermanas mediáticas tienen que hacerlo de la manera más agraciada posible.
¿El resultado? Pronto lo veremos en las fotos de la prensa rosa norteamericana. Os mantengo informados. Solo añadir que Kim se ha comprado pelucas en tono verde para ir a tono con su nuevo modo de transporte.