19. Crujiente, en Café San Francisco
Yo no se si es la más solicitada, pero seguro que es la más rica. La “Crujiente” de Paco es una de las tostadas “de nuevo cuño”, con más rancio abolengo de todo el Casco Antiguo. Tanto en su anterior ubicación (en el pasaje comercial de la Avda. Juan Carlos I, en el local tradicional de Golf) como en este local más recogido en las “traseras de Simago”, la tostada sale innumerables veces del grill, tanto que el aroma a queso fundido predomina en el entorno por encima de cafés, ajos o aceites.
Basicamente la Crujiente es “media de salmorejo, con jamón y queso, primero tostada y luego gratinada”. Una combinación absolutamente universal que nos lleva a los sandwiches tradicionales, la pizza de prosciutto o las sincronizadas mexicanas. El sabor es incomparable y, lo que es más importante, la textura es sumamente apetecible.
A esto se le añade la profesionalidad de Paco, hijo del mítico Fabián, toda una institución en el Casco Antiguo con su Pastelería, en la que los niños de la época probábamos los tigretones y phoskitos (pasteles y pastelitos). Y si además eres del Atleti… mejor.
Absolutamente de acuerdo con lo de profesionalidad de Paco y la simpatía de Sandra…