Damià: profesionalidad por bandera
Allá donde ha ido, ha cumplido. Barcelona, Racing, Betis y Osasuna saben que Damià Abella era, sobre todo, el futbolista profesional que se lo dejaba todo en el campo. Este lateral derecho espigado (mide 1,88 metros), comenzó su carrera futbolística profesional en el Figueres, el club de su ciudad, en Segunda División B. Era la temporada 03/04 y enseguida un grande se fijó en él: el Fútbol Club Barcelona llama a su puerta la siguiente temporada para incorporarlo al filial, que también militaba en esa categoría.
Su buena temporada y las bajas en el primer equipo hicieron que esa misma temporada Frank Rikjaard lo utilizara hasta en 9 partidos. Damià seguro que no olvida un vestuario con Ronaldinho, Eto’o, Xavi o Puyol. Esa temporada, el Barça ganó la Liga.
A mitad de la siguiente temporada, después de pasar por una lesión en la cadera, Damià sale cedido al Racing de Santander. Iba a ser su primera oportunidad en Primera División con la promesa de tener minutos, y el catalán no defraudó. En medio año, jugó 18 partidos y metió 3 goles. Sus entrenadores en El Sardinero -Manolo Preciado y Nando Yosu- le pusieron habitualmente de extremo derecho, una posición en la que Damià también se ha desenvuelto bien a lo largo de su carrera gracias a su recorrido y calidad técnica. Este fue uno de sus tantos como racinguista:
Tras la experiencia en Santander, el gerundense volvió a Barcelona aunque apenas le dio tiempo a deshacer la maleta. El Betis lo fichó, pero la lesión en la cadera de la temporada anterior le dejó en blanco el primer año. Fue en la temporada 07/08, con Héctor Cúper en el banquillo, cuando Damià volvió a jugar habitualmente: 26 partidos, de nuevon retrasando su posición a la de lateral diestro. El año siguiente volvió a ser importante, anotando además 2 goles, aunque el equipo verdiblanco bajó a Segunda División. Damià continuó en la categoría de plata en Sevilla siendo un jugador importante, antes de su siguiente etapa…
En la temporada 10/11, Damià fichó por Osasuna. Con Juanfran Torres y Nelson por delante, no parecía que el catalán fuera a disfrutar de muchos minutos. De las cuatro temporadas que pasó en Pamplona, fue, de hecho, en la que menos jugó, pero acabó siendo utilizado en 27 encuentros. Nada mal.
A partir de ahí el lateral iba a convertirse en un jugador polivalente para los entrenadores de El Sadar. Osasuna carecía de un lateral izquierdo de garantías y Damià comenzó a ser usado como parche para acabar casi adueñándose de esa posición, siendo diestro. Eso ocurrió ya en la temporada 11/12, cuando disputó 30 partidos, casi todos en esa demarcación. Una situación que se prolongó en las siguientes temporadas. En total, Damià jugó 120 partidos con Osasuna en 4 años.
Durante esta etapa se ganó el cariño de la afición rojilla. Muestra de ello es el premio que la Federación de Peñas osasunista le entregó en 2014. Él mismo reconoce en varias entrevistas que en Pamplona encontró su lugar. Así se despidió de Osasuna el lateral:
Investigado
Damià se retiró en 2015 después de probar suerte en el Middlesbrough inglés. Sin embargo, su carrera futbolística se vio momentáneamente manchada por la corrupción futbolística al ser imputado en la investigación del llamado ‘caso Osasuna’, por desvíos de dinero y amaño de partidos. Finalmente, y tras declarar ante el juez, la acusación contra él, Patxi Puñal, Sergio García y Jorge Molina fue archivada.
Ahora Damià ha vuelto a los orígenes como segundo entrenador en la Unió Esportiva Figueres, que actualmente milita en Tercera División. También juega partidos con los veteranos del Barcelona.