Los mayores en acción: ni nuestros votos ni nuestros derechos están jubilados
Los Mayores han salido a la calle en todas las ciudades de España y han llegado andando desde Andalucía y el País Vasco hasta Madrid para pedir a los partidos políticos unas pensiones justas que les permita vivir con dignidad. Piden que las pensiones se blinden en la Constitución. “Ahora nos prometen mucho -dicen- pero nada está garantizado, todo queda en el aire…”.
Sobre todo, es urgente solucionar el problema de las viudas que, al fallecer el marido, tienen que vivir con el 52% de su pensión, un dinero escaso que no cubre sus necesidades básicas.
En España el 32% de la población supera los 50 años y la esperanza de vida se sitúa en torno a los 85 años. El saldo vegetativo en España es negativo: cada año se producen más muertes que nacimientos, lo que significa que estamos sufriendo un grave proceso de envejecimiento. El porcentaje de niños con respecto a la población total es de 14,76%. Los españoles, sin embargo, tienen una edad media de vida de 83 años, muy alta si la comparamos con los de otros países del mundo.
Hay que cambiar la imagen que tiene la sociedad de las personas mayores, considerándolos como un grupo que aumenta los costes sociales y colapsa los servicios sanitarios.
El Siglo XXI es el siglo de los Mayores. Hablar de los mayores es invertir en el futuro. En España más del 32% de la población está reclamando nuevas políticas sociales que garanticen la investigación sobre aspectos relacionados con el envejecimiento como base para la defensa y garantía de los derechos de los Mayores y de su dignidad.
Uno de los retos que tenemos para ponernos al nivel de los países más avanzados del mundo es el de incrementar los recursos de los servicios sociales para dar cobertura suficiente a las personas dependientes, de cualquier edad, ayudando a resolver los problemas de sus familias.
El paro también repercute en los Mayores. La crisis económica hace necesario que muchos abuelos tengan que acoger a sus hijos sin trabajo, con toda su familia, con el aumento de gasto que esto supone.
El problema de unas pensiones insuficientes no es privativo en España, en otros países también los mayores están reclamando sus derechos. En Francia llevan meses ocupando las calles exigiendo al gobierno Emmanuel Macron, que no aumente la edad de jubilación. Las calles en Paris parecen un campo de batalla….
La solución, en cualquier caso, y en cualquier circunstancia tiene que pasar por el diálogo para llegar a un acuerdo que solucione el conflicto.