En barco hacia las islas Cíes
Enclavado en el Parque Nacional de las Islas Atlánticas, en plena ría de Vigo, se encuentra este pequeño paraíso que Galicia no esconde. No en vano, una de sus playas, la de Rodas, figura a menudo en las listas de las mejores playas del mundo. No hace falta irse muy lejos para descubrir este hermoso rincón de aguas cristalinas cargado también de historia. ¡En barco hacia las islas Cíes!
Y decimos cargado de historia porque distintos estudios y restos arqueológicos demuestran que allá por el año 3.500 a.C. el ser humano habitó las islas. Desde entonces romanos, monjes de distintas órdenes y hasta piratas –no es una película, es totalmente cierto- han pasado por ellas. ¿El resultado final? Que quedaran despobladas hasta bien entrados los años 60 cuando los jóvenes de Pontevedra empezaron a utilizarlas como lugar de descanso. Desde entonces su visita no ha dejado de crecer.
¿Cómo llegar?
Lo primero que hay que tener en cuenta es el aforo limitado. La Xunta de Galicia no permite más de 2.200 visitantes al día. ¿Poco? ¿Mucho? En cualquier caso una medida que se ha visto obligada a tomar de manera drástica ante la masificación que en muchos momentos del año –especialmente en verano y puentes- han llegado a soportar las islas Cíes.
Para llegar solo nos queda tirar de barco. Hay salidas diarias desde Vigo, Cangas o Baiona. Solo la isla de San Martiño queda fuera del circuito de líneas regulares y para acceder a ella es necesaria una embarcación privada. Pero ¡ojo! no basta con pagar el billete y subirse al barco. Para evitar el aforo excesivo la Xunta de Galicia obliga desde este año a realizar una solicitud vía Internet para visitarlas. Es una medida que ya tiene en marcha con la playa de las Catedrales, en Lugo, y que promete cambiar en esta temporada turística la forma de visitar las islas Cíes.
Y una vez allí ¿qué?
El archipiélago está formado por tres islas: Monte Agudo, O Faro y San Martiño. Tres islas con nueve playas siendo la más famosa, como decíamos, la de Rodas porque une las dos primeras. Pero hay ocho playas más. En ‘La Postal’ nos quedamos con las de Bolos y Cantareira.
Una vez en el parque el día da para mucho. Playa, descanso, senderismo (hay hasta cuatro rutas), fotografía (las imágenes tienen el éxito asegurado), o para practicar el buceo. Los fondos marinos son excepcionales. Desde aquí también recomendamos echar un vistazo a sus faros.
Dormir y comer en las islas
¿Se puede comer y dormir en las islas? Sí, se puede. Aunque desde aquí recomendamos la comida de picnic las islas cuentan con restaurante. Eso sí, si lo que queremos es quedarnos a dormir la única opción pasa por la acampada. Y no se puede hacer por nuestra cuenta. Debemos instalarnos en el camping de las islas. Éste cuenta con capacidad para unas 800 personas y conviene reservar plaza con antelación. Es uno de los más demandados de toda Galicia. Además quienes duerman en él pueden apuntarse a una actividad única: excursiones nocturnas para ver las estrellas.
Islas Cíes, un paraíso gallego por descubrir. Y por cuidar y proteger. No en vano luchan por ser declaradas Patrimonio de la Humanidad. También está en nuestra mano que este ecosistema único lo logre.
Siguiente ‘Postal’: Soria.
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