Recapitulando la New York Fashion Week
Porque la semana de la moda es mucho más que la semana de la moda, aproveché unas horas estando en Nueva York durante la Fashion Week para hacer algo más que ver desfiles. Y es que muchas veces, las tendencias están en la calle, en los escaparates, los restaurantes, la gente. Aquí os dejo lo que me llamó la atención…
Carine Roitfeld (ex directora de Vogue París) llegó al restaurante Sant Ambroeus del West Village en su Mercedes todoterreno (después de todo era la Mercedez Benz New York Fashion Week). El Mercedes G Wagon (como se le conoce) que cuesta más de 100.000€, llevaba la cabecera de su nueva revista plasmada en la puerta (CR). Pero por mucha directora que fuera y que es, tuvo que esperar como todo el mundo para que la sentaran en una mesa. Así es Nueva York.
Aquí hasta los fotógrafos van vestidos como los asiduos a la primera fila.
Para los que creen que la única marca «made in Spain» que triunfa fuera de nuestro país es Zara, les gustará saber que en los almacenes Jeffrey tenían una pared entera en la sección de bolsos, con bolsos de Loewe. ¡Viva!
Ojalá ser corresponsal en Nueva York y contestar a todas las llamadas con «estoy en la oficina»… os dejo foto de La Oficina Latina en Nolita.
Los escaparates de los almacenes Barney’s son una referencia a nivel mundial. La temática esta vez eran los zapatos, porque estaban promocionando su quinta planta (de calzado de lujo). En letras rojas: Count the shoes (cuenta el número de zapatos). Podías rellenar un formulario y el ganador tenía premio. En el escaparate de al lado, más zapatos, esta vez sumergidos en una pecera XXL completa con peces rojos de verdad. Y sabiendo como son en EEUU, seguramente, estos peces vivían en mejores condiciones que mucha gente de NY.
La fiebre de la bicicletas está en todas partes. El hotel Maritime del Meat Packing District hasta tiene unas con cesta de madera para sus clientes. Inciso: su restaurante La Bodega es ideal.
Porque en Nueva York también se puede seguir con la dieta, si quieres probar un cupcake, no hace falta que sea tamaño «family size» (grande). El genial concepto de Baked by Melissa es que puedes probar varios sabores y para ello los hacen en versión XS.