Emaya adecenta la puerta del Luis Sitjar y un histórico seguidor mallorquinista se lo agradece

El Luis Sitjar ya es "sólo" recuerdos, el testimonio de la historia del RCD Mallorca y de la ciudad de Palma, los que guarda cada aficionado mallorquinista y cada vecino del barrio de Es Fortí. Más de cinco décadas de campo del RCD Mallorca del que ya sólo queda un muro y una puerta que se ha conseguido mantener.

Tras venderse al Ayuntamiento de Palma los títulos de propiedad del solar del antiguo campo del RCD Mallorca, tras un largo y complejo proceso que ha durado 20 años, la obsesión de muchos seguidores bermellones es mantener como recuerdo vivo del Lluís Sitjar su histórica puerta. No es extraño ver de vez en cuando diferentes grafitis, y en diferentes ocasiones los colectivos mallorquinistas han convocado sesiones de limpieza para adecentar la puerta.

Ahora, un histórico peñista del RCD Mallorca, Pello Amengual, ha dado las gracias al servicio municipal de Palma de EMAYA, por haber enviado operarios para limpiar pintadas que ensuciaban la puerta, que está considerada patrimonio de la ciudad. La propia ARCA (asociación de defensa de patrimonio de Mallorca) pidió que fuera protegida y que se mantuviera en su actual ubicación.

El Ayuntamiento, RCD Mallorca y colectivos de aficionados bermellones así como vecinos, deben ponerse de acuerdo sobre si mantenerla en el barrio, se llegó a hablar de trasladarla a Son Moix, pero parece obvio que lo normal será mantenerla en el barrio, en un solar que será renovado y que contará con nuevo equipamiento deportivo, ya que el Ayuntamiento tiene previsto construir un pabellón allí mismo, con capacidad para 2.000 personas. Una nueva dinamización deportiva que revitalice una zona que se había degradado desde el cierre del Luis Sitjar hace más de dos décadas.

Para muchos seguidores será algo incongruente e incomprensible que después de descartar aquel mismo lugar como ubicación para el nuevo campo del Mallorca, es decir, haber hecho un nuevo Luis Sitjar, porque iba a ser otra cosa, ahora vuelva a ser una zona deportiva pero sin su campo de fútbol, que ya es Son Moix. Para este viaje no hacían falta estas alforjas se dicen algunos.