Por qué en el español usamos 'quepo' para la primera persona de 'caber': ¿Por qué no se usa 'cabo'?
A veces escuchamos a los niños usar incorrectamente el presente del indicativo de 'caber' y les corregimos pero, ¿sabemos realmente por qué?
Madrid - Publicado el - Actualizado
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Aunque algunas listas coloquen al español como una de las lenguas más sencillas, ya no sólo para los europeos, si no para todo el mundo, no la exime de tener algunos puntos rocosos a la hora de aprender a hablarlo con soltura. Y uno de esos puntos es claramente la conjugación de los verbos, al tener un origen romance, como el italiano o el rumano. De hecho, se estima que en la lengua castellana hay un total de 20.000 verbos, 2.000 de ellos irregulares.
Unos datos que no hacen nada fácil conjugar verbos del español por primera vez y, en la misma situación que están los que nuevos hispanohablantes adultos están los niños que dicen sus primeras palabras. Aunque hay de todo, no son pocos los niños que les sale decir de primeras 'cabo' para la primera persona del presente del indicativo en lugar de la forma que usamos el resto, que es 'quepo'. Pero, ¿sabes por qué se aplica esta norma? ¿En qué momento empezamos a decir 'quepo' si 'cabo' se parece mucho más a la raíz del indicativo 'caber'?
Por qué decimos 'quepo' y no 'cabo'
Hay un detalle de la evolución moderna del castellano que muchos se habrán percatado, y es que casi al 100% de los nuevos verbos que se crean en la lengua castellana son de primera conjugación. Esto es, cada vez que adaptamos un nuevo verbo a nuestro idioma, su infinitivo siempre acaba en -ar. Por ejemplo, cuando se produjo el 'boom' de Twitter, el verbo 'twitt' del inglés se trajo al español como 'tuitear' y no como 'tuiter', como hubiera sido más orgánico.
El motivo radica en que la mayoría de los verbos de segunda y tercera conjugación (lo que acaban en -er o -ir) provienen incluso de antes de la implantación del castellano y tienen su raíz en el latín. A partir de entonces, los únicos verbos productivos son los de la primera conjugación por su mayor facilidad a la hora de conjugarlo.
Así, 'caber' es uno de esos 2.000 verbos irregulares que se incluyen en la gramática del castellano, como explica la propia Real academia Española (RAE) a un usuario de 'X' que le preguntaba sobre la posibilidad de usar 'cabo'. “El verbo 'caber' es irregular, de ahí que presente formas que no son esperables si fuera regular. Lo que hacen los niños al decir *'cabo', y no 'quepo', es aplicar las pautas de la conjugación regular, que es la que primero dominan”. Así, la explicación es que los niños lo dicen porque emplean la conjugación que les es más “cómoda” y la que se aplica casi desde tiempos del latín. No obstante, y al menos en este caso, lo más simple no es lo más correcto.
Las faltas de ortografía más frecuentes entre españoles
Mucha gente quiere dedicarse a escribir ya sea por hobby o profesionalmente, pero a la vez, debe tener en cuenta que hay unas bases ortográficas y gramaticales que, en la medida de lo posible, debemos respetar lo máximo posible. “Ahí”, “hay” y “ay” también es un error que solemos cometer cuando somos pequeños. También “haya”, “halla” y “aya”, en lo que confundimos el árbol y la conjugación de haber con el presente del verbo “hallar” y, aya, un sustantivo que hace referencia a una mujer encargada del cuidado de la educación de niños o de jóvenes.
“Yendo” y “llendo”: Si estamos escribiendo “yendo”, nos referimos al gerundio del verbo ir: estoy yendo de Plaza España a la Puerta del Sol, mientras que cuando escribimos “llendo”, lo estamos haciendo mal, ya que esa palabra no existe y sería un error grave.