El satélite Paz, nueva herramienta de los servicios de inteligencia españoles

España tendrá en órbita dentro de unos días un satélite de observación que recogerá información para los servicios de inteligencia. El satélite Paz, que será lanzado desde la base aérea de Vandenberg -en California- este sábado 17 de febrero a bordo de un cohete Falcon 9, se dedicará también a tareas de vigilancia, cartografía y control fronterizo.

El Paz tiene un sistema de radar capaz de obtener hasta cien imágenes diarias de la superficie terrestre, y dará 15 vueltas al planeta cada 24 horas. Ángel Moratilla, subdirector general de Sistemas Espaciales del INTA (Instituto Nacional de Técnicas Aeroespaciales), -en una entrevista a COPE- asegura que este satélite “es de importancia estratégica” para el Ministerio de Defensa y le suministrará “imágenes que no podría conseguir ningún otro modo”. Podrá obtener imágenes dia y noche, sean cuales sea las condiciones meteorológicas ya que -según Moratilla- al ser “un satélite radar sí puede ver a través de las nubes”, trabaja con frecuencias distintas a las ópticas “ con ondas que son capaces de atravesar las nubes, y no está limitado por la meteorología”. Explica que “el radar ilumina la Tierra, ésta refleja la señal, la recibe el satélite, la procesa y la convierte en imagen”.

La estación terrestre principal -desde donde se controlará el satélite, se enviarán las órdenes y se recibirán las imágenes- estará en el centro del INTA en Torrejón de Ardoz. Además, habrá un centro de respaldo en la estación del INTA en Canarias, que estará de back up en momentos de emergencia.

No obstante, una vez que se encuentre en órbita, las primeras operaciones se llevarán a cabo desde el DLR, el Centro Aeroespacial Alemán, porque “son muy críticas” y la fase de lanzamiento y de órbita temprana es “una etapa tremendamente delicada”. Dice el subdirector general de Sistemas Espaciales del INTA que “hay que ponerlo perfectamente en órbita, y probar todos los sistemas, activarlos y monitorizarlos”, y el DLR tiene experiencia en este tipo de satélites, en este tipo de fases, y la empresa Hisdesat -fabricante y propietaria del satélite- “no ha querido correr riesgos”.

El satélite Paz está listo desde 2015, pero no se ha puesto en órbita antes por el incumplimiento de contrato de la compañía rusa Kosmotras que inicialmente iba a realizar el lanzamiento desde un cosmódromo. Esto ha llevado a un retraso por razones “de contenido más político que técnico”. Ángel Moratilla cuenta que el Paz es un satélite state of the art, “lo mejor de lo mejor que hay en el mundo”, enormemente moderno y con una gran flexibilidad, porque “no está especializado y puede hacer muchas cosas, todas ellas a un gran nivel”. Su vida operativa “nominal” es de cinco años y medio, pero con la tecnología de la que dispone “es altamente probable que dure el doble”. Tiene un peso de 1.350 kilogramos, mide 5 metros de largo y 1,5 metros de diámetro.

Sólo Italia y Alemania poseen una herramienta de observación similar en Europa. “España entra en un club absolutamente selecto”, señala Moratilla. El INTA, que fue el pionero del espacio en España en los años 60, liderará la explotación científica del satélite.