La Bolsa pone una guinda dulce a una semana amarga

 el índice Ibex 35 cierra en los 9.261 puntos

Imagen de la Bolsa de Madrid

Fernando Mañueco

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Tras varios días pendientes del pacto entre Sánchez e Iglesias para intentar formar gobierno, los inversores hoy han vuelto sus ojos nuevamente y una vez más hacia las negociaciones comerciales entre Estados Unidos y China. En las últimas horas han renacido las esperanzas. Los mercados vuelven a pensar que el acuerdo está próximo. La Bolsa de Nueva York marca esta tarde nuevos máximos. Los mercados, en su fuero interno, siguen esperando que las dos mayores potencias económicas del mundo alcancen y firmen en breve un acuerdo comercial, aunque sea de mínimos. Hoy, el secretario de comercio de Estados Unidos, Wilbur Ross, ha asegurado que es muy alta la probabilidad de que su país llegue a un acuerdo comercial con China. Pese a estas buenas previsiones, el presidente Trump todavía no ha ordenado eliminar o retrasar los nuevos aranceles a productos chinos que entrarán en vigor a mediados de diciembre. Las espadas siguen en alto, pero parece que la situación de fondo ha mejorado.  

Dentro de casa, el índice Ibex 35 ha ido a buscar  soporte en la zona de los 9.200 puntos, cuando hace pocas sesiones rozaba los 9.500. Ha cerrado hoy en 9.261 puntos, con alza de un 0,96 por ciento. El vencimiento de opciones y futuros ha dado alas hoy a los mercados. La semana se ha salado con una pérdida próxima al 1,5 por ciento. En lo que va de año,  el Ibex ha subido un 8,4 por ciento, cuando el índice Paneuropeo Eurostoxx 50 se ha revalorizado más de un 23 por ciento.

La prima de riesgo ha pasado en pocos días de 65 a 80  puntos. Es su peor nivel desde mediados de septiembre. El rendimiento de los bonos a diez años ha subido del 0,35 al 0,45 por ciento. Esta tarde la agencia Moody's, revisará la calificación crediticia de España.  Hay apuestas para todos los gustos. Desde los que esperan que no mueva ficha, a los que creen que rebajará la perspectiva del “rating” de España de estable a negativa, debido a la inestabilidad política, pasando por los que esperan una rebaja de un escalón en la nota de España.  Pero también hay que cree que es posible que Moody's  de una patada a seguir y retrase su decisión a la espera de comprobar si efectivamente se forma gobierno y se anuncian las primeras medidas económicas.

En el capítulo macroeconómico, hoy se ha conocido que la producción industrial se ha contraído en octubre en Estados Unidos en ocho décimas, que es un dato mucho peor del esperado.  También ha empeorado la tasa de utilización de la capacidad productiva. Por su parte, las ventas al por menor en EEUU han aumentado un 0,3 por ciento en el mes pasado. En septiembre se habían contraído. Es una referencia de gran calado, porque más de las dos terceras partes del PIB estadounidense descansa en la actividad del consumo privado.  La Reserva Federal de Nueva York ha rebajado sus previsiones de crecimiento del PIB en el cuarto trimestre del año, del 0,7 al 0,4 por ciento. En general todas estas cifras dan cal y arena casi a partes iguales.

En la zona euro se ha publicado hoy la balanza comercial. El superávit ha aumentado en septiembre algo más de lo que pronosticaban los expertos. Ha alcanzado los 18.700 millones de euros. Las exportaciones han crecido un 0,7 por ciento y las importaciones un 1,5 por ciento. También se han publicado los datos de inflación de la eurozona. El IPC ha repuntado un 0,1 por ciento en octubre, con una tasa interanual del 0,7 por ciento. No se ha alejado de las previsiones de los analistas. En España la deuda pública se ha incrementado en 7.000 millones de euros en septiembre. Alcanza los 1,2 billones, que equivalen a un 98 por ciento del PIB. Es su segundo mayor registro de la historia.

En el mercado de materias primas, el barril de crudo se mantiene por encima de los 62 dólares. La Agencia Internacional de la Energía espera que el mercado se muestre más tranquilo el próximo año. El aumento de la producción de los países que no están integrados en la OPEP y los altos niveles de reservas mantendrán bien surtidos a los mercados, a pesar de que se espera un aumento de la demanda si finalmente concluye la guerra comercial.