La Bolsa reacciona en el soporte “psicológico” de los 8.000 puntos, mientras siguen las volteretas del Bitcoin
El índice Ibex 35 ha cerrado en 8.112 puntos, con baja de un 0,5 por ciento. Los analistas no consideran la cota de los 8.000 puntos como un nivel técnico relevante
Publicado el - Actualizado
3 min lectura
El índice Ibex 35 ha cerrado en 8.112 puntos, con baja de un 0,5 por ciento. Los analistas no consideran la cota de los 8.000 puntos como un nivel técnico relevante. Pero sí tiene importancia como referencia “psicológica”. Hoy la Bolsa ha rebotado al acercarse a esa zona, concretamente en 8.040. Los mercados financieros, a fin de cuentas, se mueven como consecuencia de las decisiones de cientos de miles de inversores.Y ahí tiene mucho que decir la psicología de masas.
La aerolínea IAG ha destacado con una subida vertical del 8 por ciento. Publicará resultados este viernes. Los analistas pronostican unas pérdidas superiores a los 4.500 millones de euros en el ejercicio 2020. Los expertos del Bank of America creen que las vacunas cambiarán pronto las reglas de juego en el sector y que pronto las compañías comenzarán a recuperarse.
Hoy han flojeado los bancos, con la excepción de Sabadell, que intenta recuperar la cota de los 40 céntimos por título. Por su parte, Bankinter pagará dividendo el uno de marzo, a razón de cuatro céntimos de euro brutos por acción. Será con cargo a los resultados del pasado ejercicio. Ha bajado hoy Laboratorios Almirall, cuyo beneficio se redujo un 30 por ciento el año pasado, hasta 74 millones de euros. Los bolsistas han mirado de reojo hoy hacia Abengoa, que está al borde de la quiebra. Su cotización está suspendida desde el pasado verano.
Sobre el ánimo de los mercados ha pesado el repunte en la rentabilidad de los bonos. Los de Estados Unidos ofrecen esta tarde un 1,33 por ciento, pero han llegado al 1,38 por ciento. Mientras tanto el rendimiento de las obligaciones de referencia en España ha bajado en pocas horas desde el 0,38 hasta el 0,32 por ciento. Se ha aliviado ligeramente la tensión tras la comparecencia de la gobernadora del Banco Central Europeo, Christine Lagarde, ante el Parlamento Europeo. Ha mostrado su intención de vigilar de cerca los movimientos de los bonos, por si pudieran influir sobre la recuperación económica y la financiación de las empresas. Lagarde ha asegurado que el BCE mantendrá su apoyo a todos los sectores de la economía con unas condiciones favorables de financiación mientras dure la pandemia. Hoy ha conocido el índice IFO de clima empresarial de Alemania. Ha sorprendido agradablemente a los mercados financieros. Ha crecido en febrero hasta una lectura de 92,4 puntos, frente a los 90,1 del mes anterior y frente a los 90,5 puntos que esperaban los analistas.
En el mercado de criptodivisas, el Bitcoin ha protagonizado una espectacular serie de volteretas. Ha llegado a superar los 57.000 dólares, para caer después de una tacada hasta la zona de los 48.000. Desde esa cotización ha vuelto a remontar. Esta tarde se paga a 53.000. Mayor inestabilidad, imposible. Una locura. El presidente de Tesla, Elon Musk, ha señalado que esta criptodivisa podría haber alcanzado ya niveles demasiado altos. Hace pocos días, recordemos, Tesla, el gigante estadounidense de los vehículos eléctricos de lujo, compró 1.500 millones de dólares en bitcoins y anunciaba que permitirá el pago de sus coches en esta moneda. Ahora él mismo enfría la escalada del Bitcoin.
Los analistas del banco estadounidense de negocios JP Morgan constatan que en las últimas semanas se ha reducido la liquidez del mercado de Bitcoins, por lo que flujos relativamente pequeños de órdenes de compra o de venta tienen gran impacto en los precios. El presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos, Jerome Powell, tiene previstas intervenciones públicas el martes y miércoles. Comparecerá ante el Congreso y el Senado. Sus palabras son cita obligada para los inversores de medio mundo. Quizá se refiera, entre otras cosas, a las aguas turbulentas que bajan por el mercado de las criptodivisas.
En los demás mercados, destaca el petróleo, que se paga a su precio más caro desde hace un año. El crudo tipo Brent del Mar del Norte, el que se utiliza como referencia en Europa roza los 64 dólares. El barril de West Texas supera los 61. El euro se cambia por 1,2140 dólares. La libra esterlina se mantiene por encima de 1,40 dólares.