¿Cómo afecta al cliente la compra de Air Europa por Iberia?
El nuevo grupo suma el 72% de los pasajeros en vuelos nacionales
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El pasajero ¿gana o pierde con este operación? Según con el que hables. Fuentes de Iberia consultadas por COPE señalan las ventajas que tiene la operación para el cliente. Primero porque abre la puerta a hacer más sostenibles y rentables las rutas que ya existen, al aumentar la ocupación. Segundo, a lanzar nuevos destinos. Por ejemplo se trata de una gran oportunidad para crecer en Asia, África, Norteamérica donde ahora dan pocas opciones. En principio, añaden, las sinergias que se consiguen deberían de permitir precios más bajos y aumentar servicios (recuerdan que así se ha visto en la unión de Iberia y British Airways). Además la coordinación del programa de vuelos permitirá mejorar horarios o frecuencias (como ha sucedido en el Puente Aéreo entre Iberia y Vueling). En definitiva, los clientes dispondrían de mayor oferta y flexibilidad.
Sin embargo algunos expertos no lo tienen tan claro. Ya hablan del riesgo de monopolio, de impacto negativo para el pasajero. Puede perjudicar a los usuarios en aquellos destinos donde haya una superposición de rutas y estos sean los únicos operadores. Organizaciones de consumidores aseguran que el movimiento es negativo al recortar la competencia. Recuerdan que aquí en España si sumamos Air Europa a las compañías que forman ya el holding IAG -es decir Iberia, Vueling, Air Nostrum- coparían el 72% de los que viajan en vuelos nacionales, según las estadísticas de AENA de los nueve primeros meses del año. Puede agravar la situación de los que residen en las Islas, fuera de la Península, que ya asumen -señalan- unos precios especialmente altos para viajar a ella.
Competencia tendrá que valorar si hay o no posición de dominio. IAG puede verse obligada a hacer concesiones a las autoridades para lograr el visto bueno a la operación. Fuentes cercanas a la operación apunta que el regulador también debería de tener en cuenta el peso del AVE en ciertas conexiones.