España: un año perdido en la lucha contra el déficit público

El Banco de España acaba de actualizar sus proyecciones económicas y da un varapalo al Gobierno de Pedro Sánchez. Empeora las previsiones de déficit público. Eleva un décima, hasta el 2,5% del PIB, la este año porque por ejemplo “los ingresos han ido algo peor y han crecido las partidas para salarios públicos”, según el director general de Economía y Estadística, Óscar Arce. El caso es que si se confirma ese desvío del 2,5% sería la misma cifra que en 2018 lo que confirmaría que este ha sido un ejercicio perdido en materia de consolidación fiscal. Sería el primer año en que el agujero no se reduce desde 2012. El déficit se quedaría lejos del objetivo oficial de 1,3%, del 1,8% que se fijó luego el Gobierno de Sánchez, incluso del último del 2% que dejó caer tras asumir la nueva prórroga presupuestaria. Lejos en todo caso de lo comprometido con Bruselas. El incumplimiento conllevaría ajustes adicionales.

El ritmo de reducción del déficit público durante los próximos años sería también más lento. Ahora el organismo pronostica un déficit del 2,1% en 2020 y del 1,8% en 2021 lo que supone en ambos casos un empeoramiento de tres décimas, porque “los supuestos fiscales sobre los que descansan estas proyecciones incorporan una revisión de la asunción acerca de la revalorización de las pensiones”, argumenta. En 2022 llegaríamos al 1,4% del PIB.

CRECIMIENTO Y EMPLEO

No hay novedades en cuanto al crecimiento del PIB. Tras el fuerte recorte aplicado hace tres meses en las previsiones, ahora el organismo mantiene previsiones porque observa una “estabilización” de la actividad. Es decir, el frenazo no va a más. El avance será del 2% este ejercicio. Se irá moderando al 1,7%, el 1,6% y el 1,5% en cada uno de los tres años siguientes. Se seguirá apoyando en el tirón del consumo y de la inversión.

El Banco de España ve también una mejora en el deterioro del empleo pero empeora ligeramente la evolución de la tasa de paro. Seguirá descendiendo aunque a un ritmo menor. En concreto cerrará este año en el 14,2% de la población activa y en el 13,8% en 2020 (una y dos décimas por encima de las estimaciones que lanzó en septiembre).

Arce no ha querido echar más leña al fuego sobre una eventual nueva subida del salario mínimo interprofesional en 2020, hasta los 1.000 euros brutos al mes como pretenden PSOE y Podemos. “Cuando tengamos una propuesta con cara y ojos pondremos en marcha a nuestros equipos para hacer una valoración minuciosa”, afirma el director general de Economía y Estadística. Mantiene que el incremento del SMI de este año, superior al 20%, ha ralentizado más el empleo en aquellas comunidades autónomas donde tiene “una mayor prevalencia”. Eso sí, afirma que todavía no hay “datos irrefutables” sobre el impacto concreto que ha tenido en el mercado laboral.

RIESGOS INTERNOS Y EXTERNOS

El Banco de España asegura que “los riesgos al escenario central de crecimiento del PIB se encuentran orientados, de manera predominante, a la baja”. En el plano interno, insiste en que persiste la incertidumbre sobre la formación del futuro Gobierno y el diseño futuro de las políticas económicas, en concreto de los elementos necesarios para retomar el proceso de consolidación fiscal. Además mantiene que es necesario adoptar un programa de reformas estructurales orientadas a impulsar el potencia del crecimiento de la economía.