El fracaso de la medida del Gobierno para facilitar el pago de hipotecas: Calviño busca un golpe de timón

"Habría que analizar las solicitudes que van quedando fuera para ir mejorando el protocolo y evitar una crisis financiera como la de hace una década", dicen fuentes bancarias

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

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La vicepresidenta Nadia Calviño se reúne con los bancos y asociaciones de usuarios financieros para hacer balance tras dos meses de aplicación del Código de Buenas Prácticas para facilitar el pago de hipotecas también a la clase media. De momento, las solicitudes apenas superarían las 1.500, lejos del millón de beneficiarios a los que pretendía llegar el Gobierno.

"La acogida está siendo residual", nos dicen fuentes bancarias, "porque el cliente español recorta antes de otros gastos, que del pago de la hipoteca". Pero también hay un factor tiempo. Patricia Suárez, presidenta de la Asociación de Usuarios Financieros (ASUFIN), explica que "a partir de abril, en el segundo trimestre, a esas familias se les va a sumar una doble subida que, sumada, supone para muchas familias 200 o 300 € más al mes, que es una barbaridad".

Los expertos ven difícil llegar al millón de beneficiarios si no se rebajan los umbrales. Unos requisitos, cuatro, difíciles de cumplir: renta límite de hasta 29.400 €, una cuota que suponga entre el 30 y el 50% de los ingresos, una subida de intereses del 50% y una vivienda por debajo de 300.000 € de valor. Parámetros generalistas que no distinguen por territorios. "Habría que analizar las solicitudes que van quedando fuera para ir mejorando", dicen, "el protocolo y evitar una crisis financiera como la de hace una década".

"Muchas familias"

El consejero delegado de Santander España, Ángel Rivera, aseguró esta semana que "ya hay muchas familias" que se están interesando por las medidas aprobadas por el Gobierno para aliviar la carga hipotecaria de las familias vulnerables afectadas por el alza del euríbor. Además, ha mostrado su rechazo a topar las hipotecas porque, en su opinión, "cualquier limitación expulsaría en el futuro a muchos compradores", lo que no quita para que el sector sea consciente de los problemas que pueden tener las familias más vulnerables y "ahí la banca pone su granito de arena para favorecer y ayudar".