La incertidumbre política, principal amenaza para los empresarios
Uno de cada dos directivos españoles reconoce que la incertidumbre política afectó el año pasado negativamente a su negocio. En general los empresarios se muestran optimistas con la situación económica. Prevén vender más, aumentar inversiones y plantilla según un informe de KPMG.
Publicado el - Actualizado
3 min lectura
La incertidumbre política, en sus diferentes versiones, sigue generando inquietud entre los empresarios. Más de la mitad (53%) de los directivos encuestados considera que la situación vivida en 2017 tuvo un impacto negativo en su compañía. Y el 82% lo cita como la principal amenaza este año para la economía española. Le siguen las tensiones geopolíticas (40%) y los riesgos que pueda generar el fin de la política monetaria expansiva por parte del Banco Central Europeo (34%).
Con todo los empresarios y directivos españoles expresan su valoración más positiva de la coyuntura económica de los últimos ocho años, tal y como expone el informe Perspectivas España 2018, elaborado por KPMG con la colaboración de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE). El 60% de ellos piensa que la situación actual es “buena” o “excelente”, 23 puntos porcentuales más que en 2017 (37%), mientras que un 36% aún la considera “regular”. A 12 meses vista la tendencia no cambia, aunque sí se estabiliza. Más de la mitad de los casi 1.900 empresarios y directivos encuestados (el 53%) considera que la situación se mantendrá igual en 2018 mientras que solo un 11% teme que empeore.
Con este telón de fondo, las previsiones de negocio para 2018 son positivas. Casi ocho de cada diez (77%) de los empresarios y directivos españoles consultados esperan un repunte de la facturación este año; un 15% espera estabilidad y solo un 7% teme una caída de las ventas. Respecto a los planes de inversión, un 57% tiene en agenda aumentarlos, especialmente en nuevas herramientas tecnológicas; y solo un 9% cree que acabará reduciéndolos. Sus previsiones sobre la evolución de las plantillas también son positivas: un 45% espera llevar a cabo más contrataciones; un 39% augura estabilidad y un 17% prevé llevar a cabo ajustes.
Para Hilario Albarracín, presidente de KPMG en España, los datos “reflejan la estabilización de la economía y que los ajustes realizados en los últimos años están dando sus frutos”. Añade que “el apetito por invertir, innovar y contratar es el mejor camino para consolidar la recuperación y generar un crecimiento sostenible”.
La principal prioridad estratégica para los directivos encuestados es la mejora de procesos para ganar en eficiencia y poder hacer así frente a la creciente competencia que llega por todos los frentes, señalada por el 55%. A continuación, ante la irrupción de la economía digital y el desarrollo tecnológico, la transformación digital ha ido ganando terreno entre las prioridades estratégicas de las empresas españolas hasta situarse como la segunda más importante, señalada por el 49% de los encuestados. Ocho de cada diez empresarios afirman haber puesto ya en marcha programas de digitalización.El desarrollo de nuevos productos y servicios; la expansión internacional y la innovación disruptiva completan el top cinco de sus prioridades estratégicas para 2018.
Por regiones, destaca el optimismo de los empresarios de Baleares, donde el 87% opina que la situación actual de la comunidad es “buena”, y el País Vasco, donde un 80% califica de “buena” su coyuntura. En sus previsiones a doce meses, el País Vasco vuelve a destacar entre las más optimistas acerca de la evolución económica de su región junto a la Comunidad de Madrid y La Rioja.
En el extremo opuesto, Extremadura, Asturias y Cataluña, expresan las valoraciones más moderadas de la situación económica de sus regiones. Casi siete de cada diez encuestados extremeños la califican como regular, impresión que comparten respecto a sus comunidades seis de cada diez asturianos y el 44% de los directivos catalanes.
Entre los sectores, destaca la confianza mostrada por la automoción: el 82% considera que la situación es “buena” o “excelente”. Los empresarios y directivos de esta industria se encuentran además entre los que prevén un mayor crecimiento de ventas y entre los que más contratarán. El segundo sector más optimista es el inmobiliario (o real estate): un 79% piensa que la situación es “buena” o “excelente”. Por otra parte, destaca la mejora en las expectativas de la banca