Los avances en las negociaciones entre Rusia y Ucrania disparan a las Bolsas y abaratan el petróleo

Van por buen camino las negociaciones entre Kiev y Moscú. Se están produciendo avances significativos y ambas partes creen que es posible llegar a un acuerdo. Los mercados agradecen esas buenas nuevas. Las Bolsas europeas están a punto de recuperar los niveles que tenían antes de la invasión, mientras el petróleo se encuentra tan solo cuatro o cinco dólares por encima de su precio del 23 de febrero.

Las Bolsas de Fráncfort y París han subido cerca de un 4 por ciento. La de Madrid, algo menos de la mitad. El índice Ibex 35 cierra el miércoles en 8.380 puntos con una ganancia del 1,75 por ciento. Han tirado del mercado con fuerza los bancos, las empresas acereras y las relacionadas con los viajes. La subida no ha sido mayor porque Inditex ha actuado como lastre del resto del mercado. Los inversores han torcido el gesto a pesar de que el beneficio de la empresa dueña de la marca Zara ha crecido un 190 por ciento en su último ejercicio fiscal, hasta 3.243 millones de euros, con una facturación de casi 28.000 millones. La empresa gallega va a aumentar su dividendo un 33 por ciento, hasta 93 céntimos por acción. Es la última presentación de resultados con Pablo Isla como presidente. Deja su puesto en manos de Marta Ortega, la hija del fundador de la compañía. En lo que va de año las acciones de Inditex han perdido un 25 por ciento de su valor.

También han cerrado a la baja las eléctricas y Repsol, que se ve perjudicado por el descenso en el precio del petróleo. El crudo del Mar el Norte se paga esta tarde a 99 dólares por barril. Antes de la agresión rusa a Ucrania se negociaba a 94 dólares. Desde ahí llegó a rozar los 140 la semana pasada. Los mercados esperan y quieren creer que ambas partes acordarán un alto el fuego e incluso, en el mejor de los casos, la retirada de tropas si Ucrania reconoce a los estados disidentes pro rusos y si “se resigna” a no entrar a la OTAN. Ambas cosas parecen factibles.

Además, el precio del crudo está más barato, o menos caro, porque el nuevo brote de coronavirus en China mantiene confinados varios grandes núcleos de población, entre ellos algunos centros fabriles y tecnológicos importantes, lo que reduce la demanda de petróleo y carburantes por parte del gigante asiático. Asimismo parece que vuelven a desatascarse las negociaciones con Irán, lo que puede acercar la esperada llegada del crudo iraní al mercado. Este país puede poner en el mercado un millón de barriles diarios.

Tras el cierre de las operaciones los mercados europeos quedan a la espera de noticias de la Reserva Federal de Estados Unidos. Los mercados dan por hecho que subirá el precio el dinero en un cuartillo de punto. La inflación es más persistente de lo deseable, así que la Reserva, además, finalizará sus compras de bonos a la vuelta de poco más de un mes. Y comenzará pronto a reducir su balance mediante ventas progresivas de su cartera de bonos con el objetivo de drenar liquidez del sistema. Mañana se reunirá el consejo de gobierno del Banco de Inglaterra, que podría anunciar una nueva subida de tipos de interés. Ya los elevó en enero un cuarto de punto. Se espera ahora otra subida igual, hasta el 0,75 por ciento.

En los demás mercados, el euro sube hasta 1,10 dólares, mientras aumenta la rentabilidad de los bonos, ya que los inversores están reduciendo sus posiciones más defensivas. El rendimiento del bono de EEUU a diez años repunta hasta el 2,19 por ciento. El “bund” alemán rinde un 0,40 por ciento y un 1,34 las obligaciones españolas al mismo plazo.