Poca tela que cortar en una Bolsa muy desvaída, mientras repunta el precio del petróleo

La Bolsa ha operado hoy a medio gas, casi al ralentí, en una sesión sin la importante referencia de los mercados de Estados Unidos. La festividad nacional del 4 de julio en aquél país ha dejado a Wall Street en el dique seco. Y eso se ha notado en todos los mercados, tanto de acciones como de bonos. El índice Ibex 35 ha cerrado en 8.161 puntos, con una suave pérdida del 0,17 por ciento. En los mejores momentos del día ha llegado a los 8.250. Ha subido Telefónica y ha subido Repsol, que pagará el 7 de julio un dividendo de 0,33 euros brutos por acción. Los bancos han operado con división de opiniones. Han mejorado los dos grandes, BBVA y Santander. BBVA tiene importantes intereses en Turquía, país en el que la inflación se ha disparado hasta el 79 por ciento.

Pero han bajado Bankinter, Sabadell y Caixabank. Según publica hoy el rotativo británico Financial Times, el Banco Central Europeo estudia la forma de contener los beneficios que pueden obtener las entidades financieras con las próximas subidas en los tipos de interés. Según estimaciones del banco estadounidense de negocios Morgan Stanley si el precio del dinero en Europa sube hasta el 0,75 por ciento a finales de este año, -escenario que parece muy probable, incluso conservador- los bancos podrían obtener un margen de beneficio del 0,6 por ciento. Morgan Stanley estima que los bancos del Viejo Continente podrían obtener alrededor de 24.000 millones de euros en beneficios extraordinarios si utilizan los fondos que han obtenido en favorables condiciones durante la pandemia para volver a colocarlos en las arcas de la autoridad monetaria a tipos de interés más altos. El BCE quiere conseguir que ese dinero se destine a financiar al sistema productivo, no que se quede aparcado.

Los analistas técnicos creen que si el índice bursátil paneuropeo Eurostoxx 50 puede dar otro paso atrás si pierde la referencia de los 3.400 puntos. Puede profundizar su caída en un 10 por ciento más. Hoy ha cerrado en 3.450. Dentro de casa, el Ibex podría irse a buscar apoyo a la zona de los 7.600 si perfora la frontera más “psicológica” que técnica de los 8.000 puntos redondos. Por arriba, el techo a corto plazo se encuentra en los 9.000.

En los demás mercados, el petróleo sube hoy un 2 por ciento. Roza los 114 dólares por barril. Según los analistas de JP Morgan, podría dispararse en el peor de los casos hasta 380 dólares en los próximos meses (trescientos ochenta) si Rusia estrangula drásticamente sus exportaciones de crudo para “castigar” a Occidente. A ese precio podría llegar el oro negro si Moscú redujera sus producción en cinco millones de barriles por día, cosa que podría hacer sin dañar mucho más su ya maltrecha economía. Si el recorte fuera menor, de tres millones por día, el barril, según JP Morgan, podría irse a 190 dólares. Actualmente Rusia pone en el mercado once millones de barriles diarios. Los siete países más ricos el mundo están preparando un mecanismo para limitar el precio de petróleo ruso. Pero no es tarea fácil.

En el mercado de deuda han repuntado levemente las rentabilidades de los bonos. Las obligaciones españolas a diez años rinden esta tarde un 2,40 por ciento, con una prima de riesgo de 108 puntos. El consenso económico de los expertos consultados por PwC rebaja su previsión de crecimiento del PIB de España en este año hasta el 4 por ciento, con una inflación media del 6,6 por ciento. Hoy se ha conocido que los precios industriales han crecido en España un 36,3 por ciento en tasa interanual que es una cifra algo peor de la que se esperaba.