Septiembre comienza con color verde en las Bolsas europeas

La Bolsa entra en septiembre con el pie derecho. Los inversores que vuelven de vacaciones han traído dinero en el bolsillo y ganas de invertirlo. El índice Ibex 35 sube un 1,2 por ciento tras las primeras operaciones del día, hasta 8.950 puntos. En el mes de agosto ha subido un 2 por ciento. Y entre un 1 y un 4 por ciento han subido los índices de la Bolsa de Nueva York. Wall Street y la Bolsa de Francfort de hecho han marcado varios máximos históricos a lo largo del pasado mes. No son malos resultados teniendo en cuenta el insistente repunte de la inflación en ambos lados del Atlántico y teniendo en cuenta la expansión de la variante delta del coronavirus. La mejora de los resultados empresariales y la recuperación de la actividad económica justifican la buena marcha de los mercados de valores.

Hoy se publican los indicadores de actividad PMI del sector manufacturero en las principales economías mundiales. Son referencias de vital importancia, siempre muy seguidas en los mercados, ya que mostrarán cómo están afectando las nuevas cepas de la Covid en la recuperación mundial. Además, los inversores dispondrán hoy de las cifras de paro de la zona euro. Se espera una reducción de una décima, hasta el 7,6 por ciento. Ya se sabe que las ventas al por menor en Alemania se han contraído un 5,1 por ciento en julio, han empeorado mucho más de lo que se esperaba. Y ya se sabe que la actividad industrial ha entrado en contracción en China. Ha mostrado una lectura por debajo de los 50 que puntos que marcan la frontera entre la expansión y la contracción. Es un dato que no deja tranquilo a casi nadie.

Los mercados, finalmente, tienen cita hoy con la OPEP y sus socios, que celebran una reunión para analizar la evolución de la demanda de crudo y carburantes. Hoy el petróleo del Mar del Norte recupera los 72 dólares por barril.

Los inversores continúan digiriendo la intervención que ha realizado este fin de semana el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, en la reunión anual de banqueros de Estados Unidos que se ha celebrado en Jackson Hole, en Michigan. Ha dejado claro que la fortaleza del mercado laboral avala una progresiva retirada de estímulos. Podría comenzar antes de fin de año. Hasta ahora se daba por hecho que ese “tapering” no comenzaría hasta 2022. Mucho más lejos quedan las primeras subidas en el precio del dinero, que no se atisban antes de 2023.

Powell ha asegurado que la recuperación de la economía se produce a buen ritmo y también que espera muchos meses de inflación elevada. Por tanto, ha dejado bastante claro que el banco central estadounidense está preparado para actuar si los precios se mantienen altos de manera persistente. La Fed mantiene el precio del dinero entre el cero y el 0,25 por ciento y sus compras mensuales de activos en 120.000 millones de dólares. La próxima reunión del comité de mercado abierto de la Reserva Federal -el FOMC, que es el organismo que dirige la política monetaria en EEUU- está prevista para el 22 de septiembre.

También el Banco Central Europeo tendrá que poner pronto sobre la mesa de estudios una reducción de sus compras de bonos. La inflación se ha disparado en la zona euro hasta el 3 por ciento, que es su nivel más alto de los últimos diez años y está un punto por encima del 2 por ciento que el BCE maneja como referencia. El BCE celebrará consejo de gobierno el día 9.

Estados Unidos es la primera gran economía mundial que ha recuperado los niveles de producción que tenía antes de la pandemia. Y está a punto de recobrar cifras de paro similares a las de hace dos años, cuando rozaba el pleno empleo técnico. Este viernes se conocerán las cifras de paro de EEUU correspondientes a agosto. Los analistas esperan que la tasa se reduzca dos décimas, hasta el 5,2 por ciento y que la economía estadounidense haya creado en torno a 730.000 empleos no agrícolas, frente a los 940.000 del mes anterior.