Suben la Bolsa y la libra esterlina a la espera de buenas noticias sobre el Brexit

Los inversores han celebrado por anticipado el acuerdo entre la Unión Europea y el Reino Unido para evitar un Brexit duro. Un divorcio “por las malas” hubiera sido catastrófico para ambas partes. El índice Ibex ha terminado el día en 8.111 puntos, con alza de un 0,47 por ciento. La semana en su conjunto muestra una ligera ganancia del 0,9 por ciento. En lo que va de año, -y cuando quedan muy pocas sesiones para el cierre del ejercicio-, la Bolsa acumula una pérdida del 15 por ciento. En los peores momentos del año, a mediados del mes de marzo, el Ibex llegó a moverse por debajo de 6.000 puntos, cuando a finales de febrero rozaba los 10.100 puntos.

Los analistas técnicos aseguran que la Bolsa tiene por arriba una resistencia en la zona de 8.350 puntos y por abajo cuenta con un soporte sólido en torno a los 7.700. Los analistas esperan ver al Ibex el año que viene en los 9.000 puntos con cierta facilidad, aunque los más optimistas sitúan el objetivo más cerca de los 10.000.

Hoy la Bolsa ha celebrado media sesión. Las operaciones han terminado a las dos de la tarde. También horario reducido en los mercados del Reino Unido, Francia y Estados Unidos. Por el contrario, hoy no abren sus puertas, -quizá con buen criterio-, las Bolsas de Alemania e Italia. Mañana es festivo en todas las grandes plazas financieras.

Hoy han tirado del mercado con especial fuerza las empresas con presencia en el Reino Unido y las relacionadas con el turismo y los viajes. En las últimas horas, la esperanza de un inminente acuerdo para el Brexit ha podido más que la incertidumbre sobre las nuevas cepas más contagiosas de coronavirus y ha podido más que las amenazas del presidente saliente de Estados Unidos. Donald Trump ha asegurado que no refrendará los acuerdos que han aprobado el Congreso y el Senado sobre el nuevo plan de estímulo fiscal por 900.000 millones de dólares. Trump considera que el acuerdo entre demócratas y republicanos es insuficiente porque destina muy poco dinero a las familias. Los representantes de ambos partidos están intentando ahora aprobar con rapidez los pagos directos de 2.000 dólares a los ciudadanos que quiere Trump, en lugar de los 600 dólares aprobados por las Cámaras.

Pese a esta confrontación de última hora, Wall Street se mantiene en zona de máximos históricos, con el índice Dow Jones de valores industriales por encima de los 30.100 puntos y el Standard & Poor's 500 en puertas de los 3.700. Los expertos del Bank of America creen que el S&P 500 puede superar los 3.800 puntos a comienzos del año próximo. Ya prácticamente está ahí. Los expertos de Bankinter sitúan su objetivo para el S&P 500, en su escenario más favorable, cerca de los 4.200 puntos al cierre del año que viene.

En los demás mercados destaca la fortaleza de la libra esterlina. Se acerca al cambio de 1,36 dólares cuando están a punto de culminar las negociaciones para conseguir un Brexit consensuado a falta, según parece, de algunos flecos en el sector pesquero. La divisa británica cotiza en su nivel más alto desde el año 2018. El euro se cambia por 1,22 dólares. Algunos analistas creen que podría irse a medio plazo hasta la zona de 1,25 dólares.

El petróleo se mantiene en torno a 51 dólares por barril de crudo Brent del Mar del norte y de 48 por barril West Texas de Estados Unidos. La AIE espera para 2021 una caída de la demanda de 170.000 barriles por día. Hace pocas fechas también la OPEP redujo –una vez más- sus estimaciones sobre la demanda de crudo para el año próximo. El consumo mundial ha sido este año de 90 millones de barriles por día, un 10 por ciento menos que en 2019. Los expertos de Goldman Sachs estiman que las acciones petroleras europeas todavía tienen un potencial alcista de un 30 por ciento. Esperan que mejoren sus resultados y acometan recompras de acciones.

Por su parte, el oro ha subido hasta 1.880 dólares por onza. Anima su cotización la debilidad del dólar, las tasas reales negativas y la incertidumbre sobre las nuevas cepas de coronarvirus más contagiosas. En el mercado de deuda, la rentabilidad de los bonos españoles a diez años aumenta hasta el 0,07 por ciento (hace una semana marcaba mínimos históricos en el menos 0,03 por ciento) con una prima de riesgo de 62 puntos.